El estreno de la temporada de esquí en Valgrande-Pajares apenas duró cuatro horas. El tiempo que las condiciones meteorológicas permitieron tener la estación abierta debido a la ventisca y la nieve. Acceder al equipamiento lenense tampoco era fácil: desde primera hora de la mañana el uso de cadenas era obligatorio en la carretera del puerto de Pajares, que estaba cerrada para vehículos pesados.

Fueron unos pocos valientes los que lograron llegar al complejo invernal lenense y pegar las primeras bajadas del curso. Apenas llegaron a la decena, pero fueron suficientes como para dar por iniciada una temporada que por primera vez en el último lustro tendrá las instalaciones operativas para el puente de la Constitución.

Hoy, jornada en la que se espera que la meteorología tampoco sea demasiado favorable, Valgrande-Pajares volverá a abrir. Y en la Cordillera Cantábrica, la allerana Fuentes de Invierno y la leonesa de Leitariegos también estarán operativas por primera vez este curso. San Isidro, sin embargo, tendrá que esperar, al menos, hasta mañana, a la espera de cómo evolucione el tiempo.

Era la de ayer una jornada muy ilusionante para decenas de esquiadores que llevaban más de seis meses esperando por volver a calzarse las botas, ponerse -y quitarse- el mono, y comenzar una temporada de esquí que hacía años que no llegaba tan pronto. Sin embargo, el tiempo provocó dificultades en los accesos a la estación, así como en el propio complejo, lo que deslució un poco la puesta de largo del curso.

Tráfico restringido

Desde primera hora de la mañana, el puerto de Pajares estuvo cerrado para vehículos pesados, y los turismos que quisieran acceder a la carretera debían tener cadenas o ruedas de invierno. La Guardia Civil estaba ya en Campomanes filtrando los vehículos que podían acceder.

La nieve no era el único problema en la carretera, ya que en los últimos kilómetros del puerto, la visibilidad por la niebla era prácticamente nula. Y para llegar a la estación una vez en el cruce, el acceso también presentaba dificultades siendo imprescindibles las cadenas.

Con este panorama, apenas una decena de esquiadores llegaron al complejo lenense, que abría sus puertas a las nueve de la mañana, y que las cerraba poco antes de mediodía. La ventisca, la nieve, y el mal tiempo obligó a tomar la decisión, por lo que el estreno fue escaso. Aunque a los valientes que subieron hasta el complejo les supo a gloria. Tres remontes y cuatro kilómetros esquiables fueron el dominio del que pudieron disfrutar.

En la jornada de hoy, dos estaciones de la Cordillera inaugurarán también la temporada. Fuentes de Invierno, en Aller, ha logrado espesores suficientes como para iniciar el curso. Las previsiones pasan por abrir cuatro remontes, seis pistas, y un dominio de 2,7 kilómetros esquiables.

En cualquier caso, la dirección del complejo allerano no descarta ampliar esa superficie en el caso de que las nevadas nocturnas refuercen la capa en algún otro sector.

Leitariegos

También abrirá sus puertas Leitariegos, en la frontera con la provincia de León, que prevé arrancar el curso con tres pistas y alrededor de un kilómetro esquiable.

Pajares abrirá hoy una pista más que ayer, y ofrecerá un total de ocho recorridos, tres remontes y 4,5 kilómetros de pistas esquiables. La estación de San Isidro, por la que cada año pasan miles de asturianos, será la única que todavía permanezca cerrada este curso, y pospone su apertura al menos hasta mañana domingo, "por las condiciones climatológicas adversas".