El último examen del año de la oposición al presidente del Principado, Javier Fernández, tuvo más de simulacro de la prórroga presupuestaria que se avecina que de tanteo ante el debate de las nuevas cuentas, que ocupará las próximas semanas de actividad política en el parlamento asturiano. Aunque todavía resulte prematuro, dadas las vueltas y los giros copernicanos del tan voluble como fragmentado ecosistema político regional, el acuerdo de la izquierda se antoja tan complicado como lejano.
El simulacro suele servir de ensayo de las medidas de seguridad con las que dar respuesta ante accidentes o catástrofes. Más que prevenir, se trata de minimizar las consecuencias. Los "cara a cara" de Javier Fernández con los portavoces de Podemos, Emilio León, y de IU, Gaspar Llamazares, de ayer acabaron por tener más de terreno abonado a un nuevo desacuerdo de la izquierda que de puertas abiertas a que el Ejecutivo socialista inicie el 1 de enero con la comodidad de un nuevo Presupuesto de 4.485 millones y sin las incertidumbres de tener que preparar una batería de créditos extraordinarios para tratar de llegar a un volumen similar de recursos que, en el mejor de los casos, no estarán disponibles hasta bien entrada la primavera.
Ya fuera por lo reciente que está aún el debate sobre el estado de la región o por que los grupos de la oposición se reservan para el embate presupuestario de las próximas semanas, lo cierto es que el tono de tregua predominó en el último turno de preguntas al Presidente de este año. Las intervenciones tuvieron un tono más conciliador que en ocasiones precedentes pero ni siquiera con ésas el Gobierno y Podemos parecieron proclives a un consenso que desemboque en acuerdo sobre las próximas cuentas. Y eso que Javier Fernández trató de poner de su parte. El presidente del Principado venía de exponer ante el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, la necesidad de "un acuerdo de la izquierda que no hemos conseguido en tres años y en este estamos obligados a tener" y brindó la mejor de sus disposiciones al portavoz de Podemos, Emilio León. Pero este cara a cara resultó de lo más esclarecedor en clave presupuestaria.
El portavoz morado dejó caer las preferencias de su partido más por la integración del ciclo 0-3 años en la enseñanza pública, y de su carácter gratuito y universal y universal, que por cumplir con el pago de la deuda y sus intereses, una obligación a la que acabó comparando con "una cesta de navidad que llega sin turrón porque ya nos lo comimos primero".
León defendió la coherencia de sus principales reivindicaciones. "No son propuestas al azar, van entrelazadas", esgrimió León. Pero de sus palabras se desprende que no tiene muy buena opinión del proyecto registrado esta semana por el Gobierno ante la Cámara. "Con este Presupuesto salimos a perder", sentenció el portavoz de Podemos, tras incidir en que la deuda supera en 45 puntos porcentuales a las inversiones y "alimenta a las entidades bancarias que no devuelven el rescate y especulan con nuestra situación". Con todo, tampoco cerró puertas. "Las partidas presupuestarias no las despreciamos, están bien, pero hablamos de una reorientación clara de las políticas", resumió León.
Javier Fernández se resistió a tirar la toalla de la negociación. Asumió la deuda, como consecuencia de "la mayor crisis desde 1929" y defendió que su pago "está en la Constitución desde siempre". El Presidente destacó que la aprobación de un nuevo Presupuesto supondría una inyección de 142 millones más para el próximo ejercicio "pero no sé si usted quiere o se esté empezando a retirar" porque, añadió luego, "ustedes se borran de casi todo". Pese a ese toque de atención, Javier Fernández repasó las concesiones del Gobierno a Podemos en las últimas semanas, como la creación de la Unidad Anticorrupción; incluso se mostró dispuesto a "avanzar" en el estudio del modelo gratuito, universal y voluntario. "No descartamos nada, pero déjenos analizarlo; ¿en qué plazos podemos?; ¿qué fórmula legal le damos? Quiero avanzar en eso, usted no", dijo antes de lanzar su órdago final. "Oiga, pues mire: ustedes mismos. Pero quedará muy claro que si no hay presupuesto, por tercera vez consecutiva, serán ustedes los responsables, señor León".
Los intercambios y réplicas estuvieron exentos de la acritud de entregas precedentes. Aunque la portavoz popular, Mercedes Fernández, recordó la oferta de su partido, "ya caducada" de aprobar las cuentas del próximo año a cambio de rebajas fiscales y una mejora de la educación, el Presidente reiteró las discrepancias de fondo y "haber exprimido" el margen tributario en los acuerdos anteriores, 2015 y 2017, como las razones que impedirán un nuevo pacto para 2018 con el PP. La presidenta de los populares asturianos instó, no obstante, a Javier Fernández "a no paralizarse por miedo o por lo que le puedan imponer desde determinados despachos", en alusión a la dirección de la Federación Socialista Asturiana.
"Qué buen Presupuesto si tuviera bien Gobierno", esgrimió Gaspar Llamazares (IU) para reconocer que su coalición se reconoce en el calado social del proyecto presupuestario aunque expresó dudas sobre la gestión y ejecución del mismo. Nicanor García (Ciudadanos) también trató de meter baza en la bicefalia socialista al sostener que el Presupuesto del próximo año "está lastrado, nunca mejor dicho, por lo que usted quiere hacer y lo que su partido quiere que haga".
La presidenta de Foro, Cristina Coto, pidió cuentas a Javier Fernández de las promesas electorales lanzadas por Miquel Iceta, relativas a la creación de un Consorcio Tributario en Cataluña y a la condonación de la deuda histórica del Estado con Cataluña por la infrafinanción en ejercicios pasados. Del Consorcio, Fernández dijo que "es absolutamente constitucional" y se remitió "al Estatut y a la sentencia del Tribunal Constitucional", mientras que de la deuda histórica afirmó que "ya veremos en el marco de la negociación" de la nueva financiación autonómica aunque, anteriormente, ya había respondido al portavoz del partido naranja con un categórico "me niego" a la condonación porque "cada comunidad deberá demostrar si está infrafinanciada en un marco multilateral para determinar los recursos" del futuro sistema. La portavoz forista también le preguntó por la suerte que había corrido la reclamación de los 213 millones de los fondos mineros. "No renunciamos en modo alguno a ninguna parte", respondió Javier Fernández, quien añadió que el Principado ha presentado un incidente de ejecución, pidiendo incluso al Ministerio la identificación de los responsables del incumplimiento de ese fallo.
