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VANESA LLANEZA | Aspirante a la secretaría general de Podemos-Asturias

"Las instituciones nos han absorbido, Podemos se ha alejado del modelo participativo original"

"Abogamos por establecer acuerdos concretos con el PSOE siempre que supongan avances en los derechos de las mayorías"

Vanesa Llaneza. FERNANDO RODRÍGUEZ

Vanesa Llaneza (Langreo, 1979), auxiliar de enfermería experta en geriatría, veinte años trabajando en la hostelería, aspira a la secretaría general de Podemos-Asturias por mujer, por trabajadora precaria, por sindicalista y por su descontento con el desapego que la dirección actual demuestra, dice, con los valores fundacionales del partido. Concejala de Somos Llangréu en proceso de dejar de serlo, delegada de CC OO en su empresa y militante anticapitalista, encabeza en las primarias del 9 al 13 próximos la heterogénea candidatura "Desde abajo".

- ¿Qué la trae hasta aquí?

-Un proyecto que nace desde abajo, uniendo a diferentes sectores críticos de distintos concejos, anticapitalistas y gente no adscrita a ninguna corriente, que decide dar el paso por el descontento con un consejo ciudadano vacío de contenidos, inoperante, que no tiene en en cuenta a los círculos o las bases en la toma de decisiones importantes. En varias asambleas territoriales, los compañeros votaron y creyeron que yo era la persona ideal para encabezar esta candidatura porque representaba la lucha desde abajo entre otras razones por ser trabajadora precaria y mujer.

- ¿Por dónde quieren cambiar la organización?

-Creemos que Podemos necesita un cambio de estrategia. Ha subordinado su acción política al ámbito institucional y ha moldeado una organización alejada del modelo participativo y asambleario con el que nacimos. Hay que recuperar el papel de los círculos democratizando más las decisiones y descentralizando el poder interno. Aspiramos a una organización que sea escuela de democracia, que entienda que si la democracia no es sólo votar cada cuatro años tampoco podemos limitar la democracia interna a organizar unas primarias cada tres. También se han mantenido posiciones ambiguas en cuestiones como los planes locales de empleo o el impuesto de sucesiones que nos han debilitado.

- ¿Se han alejado del 15-M?

-Totalmente. Una de las cosas que defendemos es que hay que recuperar las calles, volver a trabajar con los movimientos sociales sin absorberlos, no esperar a que vengan a nosotros sino acercarnos a ellos, porque hemos dejado que las instituciones nos absorbieran. Es el trabajo en las instituciones lo que más crítica ha generado entre los compañeros.

- Dice su documento político que la primera asamblea de Vistalegre inauguró "una maquinaria de guerra electoral" e hizo surgir "tentaciones de adaptarse a la moqueta del poder". ¿Se han acercado a la casta?

-No diría tanto. Quizá nos dejamos llevar por la gestión. Yo soy concejala en Langreo y sé que cambiar las cosas no es nada fácil, pero somos la voz de los compañeros y a veces eso se nos ha olvidado.

- ¿Su discordancia es más estratégica que ideológica?

-Más que diferencias en los documentos político y de feminismos, la discrepancia está en cómo concebimos que debe organizarse el partido.

- ¿Y cuánto creen que cabe aproximarse al PSOE?

-Apostamos por no ser la muleta del bipartidismo, pero también por otro tipo de modelo de pactos. Con el PSOE abogamos por tejer alianzas no de gobierno, pero sí quizá acuerdos concretos, programáticos, basados en medidas específicas que reviertan en políticas determinadas y signifiquen avances en la recuperación de derechos de la mayoría social.

- ¿Cuál es su idea de la confluencia, les gusta Unidos Podemos?

-Defendemos una confluencia dentro de la izquierda, pero no sólo con IU, también con otro tipo de movimientos sociales, un poco al estilo de lo que ha sucedido en Barcelona, Madrid o Galicia.

- La candidatura del secretario general actual presume de los éxitos del municipalismo. ¿Qué dice su experiencia como concejala en Langreo?

-Tenemos que ir más allá. El municipalismo ha venido para quedarse y la experiencia incluye aspectos contradictorios, pero muy inspiradores. Hay territorios que la dirección cuida más que otros y Oviedo y Gijón, por ejemplo, tienen más privilegios y atenciones que Langreo, donde también gobernamos. Necesitamos descentralizar el municipalismo, prestar más apoyo logístico a lascandidaturas locales. Queda mucho por hacer.

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