"Ana" se fue igual que llegó a Asturias: de forma rápida. En dos días llovió la misma cantidad que en los dos últimos meses en la región. La borrasca ha dejado un reguero de desperfectos. El desbordamiento del río Nalón en Pravia ha sido una de las muestras más evidentes. El frente dejó daños en algunas plantaciones de kiwi que los técnicos comenzaron a valorar ayer. El agua afectó a las hojas y a la mitad del tronco de las plantas, que permanecieron varias horas sumergidas; por suerte los frutos habían sido recogidos. Lo que aún no se explican los productores es cómo ha podido ocurrir en cuestión de horas.

"No había casi agua en el río y en un día, ¿se desborda?", cuestiona Ignacio Suárez, propietario de la finca "El Llerón", en Santianes de Pravia, quien apunta a errores en la gestión de los ríos como posibles causantes de la riada: "Se sabía que venía una ciclogénesis contundente y no hay previsión con las sueltas en las presas, en vez de ir poco a poco aguantan hasta que no pueden más y luego abren sin tener en cuenta las mareas, que llegan hasta aquí", afirma. También achaca la salida del río a la suciedad acumulada en las márgenes, que cambia el curso del agua.

El río entró en la madrugada del lunes y a la una de la tarde ya se había retirado, aunque ha quedado agua embalsada en algunas zonas. Lo mismo pasó en la vega de Forcinas, donde comenzaron ayer, también, a evaluar los daños en la plantación, apunta Ignacio Cavanilles, el ingeniero agrónomo de "Kiwi Natur". Ambas vegas están en la margen izquierda del río. Sin embargo, en la otra, en el lado de Peñaullán apenas se notó el desbordamiento: "Se salió muy poco el río y no afectó mucho, ya tuvimos bastante con la riada de 2010", dice Ángel Cuesta, kiwicultor. En los próximos días podrán determinar si las plantas han sufrido daños o no y continuarán con los trabajos de poda, típicos de la época.

En otros lugares también se han registrados daños, aunque leves, como caída de árboles -el viento rompió uno en el parque Rubio Camín de Villaviciosa-; en Toraño, el tren tuvo problemas para circular por presencia de piedras que se retiraron fácilmente- y muchas playas amanecieron llenas de basura y restos de ramas. En las zonas altas de la Cordillera, los Picos y el Suroccidente la nieve cubre pueblos y prados. Para hoy se esperan cielos cubiertos y nevadas sobre los 2.000 metros. Pero el termómetro volverá a ascender y rozará los 20 grados de máxima en algunos puntos como Avilés.