El Presupuesto regional afronta su semana decisiva con el foco de atención sobre Podemos. El Gobierno regional y la formación morada tiene previsto volver a mantener contactos hoy, a 48 horas de que se cierre el plazo para presentar enmiendas, primer hito para medir el estado de la relación entre ambas partes.
El Gobierno de Javier Fernández ya decidió meses atrás que no tenía margen fiscal para repetir acuerdo presupuestario con el PP, tras los pactos alcanzados en 2015 sobre el IRPF y en 2017 sobre el Impuesto de Sucesiones. Con ese punto de partida, la hoja de ruta para sacar adelante las nuevas cuentas, de 4.485 millones, pasa casi de forma ineludible por llegar a un entendimiento con los dos grupos de la izquierda alternativa, Podemos e IU.
La rebaja a la mitad de la factura que pagan las familias por las escuelas infantiles es la baza con la que los socialistas tratar de forzar un imposible acuerdo con la formación en lo que va de legislatura. En la práctica, esa oferta supondría una rebaja de alrededor de 2,3 millones de euros en los más de 4 que abonan las familias para el sostenimiento de las escuelas infantiles, que suponen un coste global de 15 millones de euros. Podemos, además, ha reivindicado en esta negociación doblar el parque de vivienda pública, a razón de 750 al año; iniciar la contratación de 1.000 profesionales en la sanidad pública para reducir las listas de espera; incluir cláusulas sociales en las contrataciones del Principado y crear una Unidad Anticorrupción.
En Podemos entienden que el Gobierno socialista ha hecho "pocos avances" y su secretario general recién elegido, Daniel Ripa". En las filas socialistas sostienen que esta oferta demuestra su "voluntad de diálogo hasta el último minuto" y quieren dejar claro que los responsables de que no haya acuerdo y de que las familias "tengan que pagar el doble" por las escuelas infantiles habría que buscarlos en la formación morada.
En esta coyuntura llega la reunión de hoy en la que el Gobierno, junto con la FSA, tratará de sortear las reticencias de la formación morada. En paralelo, el comité autonómico de los socialistas asturianos abordará en su primera reunión de la etapa de Adrián Barbón, mañana martes, el visto bueno al documento entregado por IU para que luego las bases de la coalición se pronuncien. En principio no parece que haya dificultad en que los socialistas den luz verde a la hoja de ruta trazada por la coalición: respaldo a las leyes de garantía de derechos básicos que la coalición ha pactado con Podemos, dar una solución a los ayuntamientos obligados a devolver las ayudas de los planes de empleo, avanzar en la extensión de las escuelas infantiles y empezar a diseñar el calendario que debería llevar a la cooficialidad del asturiano en la próxima legislatura 2019-2023. Cuando IU tenga el sí de la FSA trasladará a sus bases el contenido del acuerdo para certificar su apoyo al proyecto del Presupuesto en el pleno del próximo viernes. Pero este acuerdo, bastante factible, entre la FSA e IU resultaría del todo estéril si Podemos no deja pasar las cuentas, aunque sea con una abstención. Mientras, en Extremadura PSOE y Podemos firmaron un acuerdo presupuestario la pasada semana.
"Hay alternativa"
Ciudadanos es el único partido con representación en la Junta General que ya ha anunciado su enmienda de totalidad. El discurso de Foro en las comparecencias previas ha sido de los más críticos con el proyecto presupuestario del Gobierno por lo que podría anunciar en las próximas horas su propia enmienda de totalidad.
El PP también ha sido contundente pero ha querido dejar resquicio a un acuerdo in extremis "para que haya alternativa a entregar Asturias al radicalismo de Podemos". La presidenta de los populares, Mercedes Fernández y José Agustín Cuervas-Mons han repetido hasta la saciedad en las últimas horas las condiciones para amarrar su apoyo en la votación del próximo viernes: avanzar en las rebajas fiscales y enseñanza infantil gratuita, unas facturas que el Gobierno regional no está dispuesto a asumir.
