El cuarto premio que tocó íntegro en Candás (Carreño) se hizo de rogar y fue el último del sorteo. Pero nada más salir, sus ecos llegaron a Villaviciosa. Una vecina de Argüeru conoció que la suerte le había sonreído mientras estaba en la Villa. "Tengo un décimo", señaló orgullosa. "Lo compré en el bar El Repinaldo, y lo comparto con un cuñado y una cuñada". Lo que no quiso compartir la afortunada fue su identidad. Tendrán que repartirse los 20.000 euros del décimo, informa V. ALONSO.