El 71.198, número agraciado con el Gordo -dotado con 400.000 euros por décimo-, fue a parar en su mayor parte a Villalba (Lugo), donde se repartieron 520 millones de euros. La suerte del primer premio de la Lotería de Navidad alcanzó también Málaga, Jaca (Huesca), Baeza (Jaén), Sort (Lleida), Madrid, Torrejón de Ardoz (Madrid), Santander, Cádiz, San Bartolomé (Las Palmas), Murcia, San Pedro del Pinatar (Murcia), Granadilla de Abona (Santa Cruz de Tenerife) y Benetússer (Valencia).
El Gordo se hizo esperar y fue el noveno premio en salir de los bombos, a las 11.55 horas, en el décimo alambre de la sexta tabla, cantada por los niños Yossueff Salhi y Noelia Katiuska.
A escasos 200 metros de la casa natal de Manuel Fraga Iribarne se encuentra en Villalba la administración Alcázar, la que vendió la mayor parte de los 1.300 décimos. A su titular, Mari Carmen Fernández, le faltaban ayer palabras para explicar la alegría que supone "repartir tanta felicidad", y, para más 'inri', entre tanta gente conocida. Para todos ellos, el año 2017 ya no será recordado como el de las preocupaciones que generó la polilla guatemalteca para los cultivos de la patata con severas consecuencias para los campesinos de la comarca. Será el año del 'Gordo'.
Cincuenta series del 71.198 fueron distribuidas a través del bar Cascudo, ubicado en un barrio de Villalba. Su propietaria, Pilar Ferreiro, explicó que los 200 millones del premio "están muy repartidos" entre la gente de "la zona", lo que para ella supone "una gran alegría", porque son "personas humildes y trabajadoras, que lo necesitan", pero que algunos décimos también salieron para otros lugares, como Vigo o Asturias. Villalba está a una hora de coche del límite con el Principado y está en la ruta por carretera hacia la Coruña y Vigo.
Entre los premiados en Villalba hay veintisiete profesores y seis trabajadores del Colegio Insua Bermúdez, que se llevan 43,6 millones después de comprar 109 décimos del número premiado. Desde Lugo hasta la residencia de ancianos 'Sagrado Corazón' de Campo de Criptana (Ciudad Real) llegaron veintiséis décimos después de que un voluntario del centro los comprara allí y los distribuyera entre los empleados y otros voluntarios que se repartirán 10,4 millones. Los siete trabajadores de la cocina del Parador Nacional de Turismo de Villalba también se llevarán un pellizco de El Gordo, gracias a un décimo del número 71.198 que jugaron a medias y que compró Sonia Requejo, quien llevó la suerte a los fogones del establecimiento.
Una parte también importante del primer premio ha viajado hasta Málaga, donde se vendieron 32 series del 71.198 en la administración 59, ubicada en la calle Mármoles del barrio de La Trinidad, cuna del humorista recientemente fallecido Chiquito de la Calzada. La administración repartió 128 millones de euros a través de los 320 décimos vendidos, de los que 70 se han distribuido entre trabajadores del Ayuntamiento, uno de ellos par una concejala El Gordo también dejó 12 millones en Madrid, ocho en la capital y cuatro en Torrejón de Ardoz, localidad en la que la encargada de distribuir la suerte ha sido la madre del lotero que ya vendió casi todo en el primer premio de 1988.
La famosa administración La Bruixa d'Or de Sort (Lleida) ha vuelto a ser agraciada y repartió cuatro millones de euros. La misma cantidad fue a parar a Jaca. Otros cuatro millones fueron para Baeza (Jaén). Siete décimos se han despachado en la administración número 1 de Santander, situada en la calle Gregorio Marañón, cerca de la segunda playa de El Sardinero, que ha repartido 2,8 millones de euros. La administración de lotería ubicada en la Avenida del Puerto de Cádiz ha vendido cuatro décimos.
Hasta la Región de Murcia se han ido 800.000 euros, la mitad se quedarán en San Pedro del Pinatar, donde se ha vendido un décimo en la administración 'El Perolo', y la otra mitad en la capital. El Gordo llegó también hasta Canarias, con algunos décimos vendidos en el sur de Tenerife y en Lanzarote.
