El paso de la borrasca "Bruno" por Asturias "no fue significativo", según ha asegurado este mañana el gerente del Servicio de Emergencias del Principado, Eugenio García, durante un acto en el centro de Emergencias de la Morgal (Llanera). Los servicios autonómicos de Emergencias han registrado 139 incidentes mientras que el centro de coordinación ha recibido 1.900 llamadas. "La mayor parte de los incidentes han tenido lugar en carreteras, con la caida de árboles, ramas o cables", añadió Eugenio García en presencia del consejero de Presidencia, Guillermo Martínez. "No hemos necesitado activar ningún plan", precisó el responsable del SEPA durante la presentación de nuevos vehículos y material de intervención por un importe de 2 millones de euros, en el que destaca una autoesclalera que irá para el parque de Avilés y que ha costado más de 700.000 euros.

La borrasca " Bruno" presentó a última hora de la tarde de ayer su tarjeta de visita, con nieve y el uso de cadenas en seis puertos de montaña, rachas de viento de hasta 130 kilómetros por hora -a las nueve de la noche en Cabo Busto (Valdés), la segunda más intensa de España- y marejada ya a primera hora de la noche. La flota pesquera de la región quedó amarrada y en las localidades costeras, como en Luanco y Llanes, los vecinos se prepararon para recibir el primer temporal de este invierno. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) mantiene para hoy la alerta naranja, y se prevé rebajarla a amarilla para mañana.

La nieve caída en los puertos de Leitariegos, Connio, Tarna, Cerredo, Somiedo y Ventana obligaban a última hora de la tarde a circular con cadenas, según la página web del 112 Asturias. Las previsiones de la Aemet apuntaban a que la situación empeoraría a lo largo de la noche y durante la jornada de hoy, con rachas de viento muy fuertes durante la madrugada y "nevadas importantes" en la Cordillera, con descenso de la cota de nieve a 900 metros.

En Gijón el fuerte viento produjo algunas incidencias, como el derribo de un semáforo en la avenida de Oviedo, cerca del desvío a la ronda sur.

En Avilés hubo suerte de que la borrasca llegara en pleno parón navideño de las ligas de fútbol, ya que parte del tejado y el alero del edificio de los vestuarios de las instalaciones deportivas de La Toba, cayó a consecuencia del viento y dejó una alfombra de cascotes a lo largo de todo el camino por el que cada día pasan cientos de niños y jóvenes para entrenar. Afortunadamente, ayer, La Toba estaba vacía en el momento del incidente.

En Luanco, la Policía Local activó el protocolo ya habitual en el concejo para los temporales. Una patrulla recorrió los negocios y edificios públicos más próximos al litoral luanquín para advertir a sus propietarios de la necesidad de retirar o amarrar bien mesas y sillas de las terrazas y recoger los toldos. En un principio, los luanquinos que saben muy mucho de las consecuencias de los temporales, sobre todo, en la zona más próxima a la playa de La Ribera, aseguraron que "no habrá problemas con la mar", dado que las mareas son "muertas", es decir, que está en calma.

Susto en Corvera

"Si hay algún problema será por el viento", indicó ayer un agente de la Policía Local al hostelero José Secades. En la parroquia de Santiago de Ambiedes hubo daños en el cableado del alumbrado público y en un tramo de la carretera entre Balbín y Faraguyes dos árboles caídos impidieron la circulación por uno de los dos carriles, entre otros daños.

El centro comercial de Corvera (Parque Astur) también sufrió el viento. Unas placas del tejado de uno de los pasillos salieron volando dejando un agujero en el techo. Los responsables del centro recalcaron que el tejado tiene una estructura de seguridad que evita que las placas caigan hacia el interior del edificio, por lo que en ningún momento, aseguran, hubo peligro para las personas.

Reforzando los amarres de los barcos y cruzando los dedos para que el temporal anunciado sea menor de lo esperado. Así se preparaban ayer los marineros de Llanes para la llegada de "Bruno". En el puerto deportivo el anuncio de fuertes vientos y oleaje para las próximas horas hizo que Puertos, para alivio de muchos usuarios, apostase por cerrar la compuerta al mediodía. Dentro del mismo se refugiaron los barcos pesqueros de menor calado. La marinería confía en poder salir a faenar el viernes.

En Llanes hubo incidentes por árboles caídos -el de Navidad, en el puente de Llanes- y en la curva de La Herrería, en Vibañu y en distintos puntos de la AS-115, carretera conocida como la "Y" del Oriente.