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Cantabria exige, al igual que el resto del Noroeste, no perder con la nueva financiación

Asturias suma aliados ante la reforma del sistema de financiación autonómica. Aunque Cantabria prefiere demorar la reforma del sistema vigente, la comunidad vecina defiende la necesidad de que se mantenga la cláusula del statu quo, es decir, que ninguna región pierda posiciones con la nueva financiación, como ya han planteado el resto de las regiones del Noroeste. Cantabria también quiere que el Gobierno central tenga en cuenta la opinión de las comunidades autónomas al abordar la revisión del sistema para que la negociación no se limite a la búsqueda de un acuerdo entre las cúpulas de los dos grandes partidos, el PP y el PSOE.

La reforma del modelo de financiación regional se presume como uno de los debates que marcará la agenda política del próximo año. Los gobiernos autonómicos ya han entablado los primeros contactos para aunar posiciones y buscar una posición común para reivindicar un nuevo modelo que satisfaga las necesidades de gasto de los servicios públicos esenciales.

La revisión del actual sistema de financiación fue el asunto central de la cumbre del Noroeste, celebrada el pasado día 4 en Oviedo, donde los presidentes del Principado, de la Xunta de Galicia y de la Junta de Castilla y León firmaron una https://www.lne.es/asturias/2017/12/05/noroeste-reclama-financiacion-autonomica/2203955.htmldeclaración institucional en la que reclamaron el mantenimiento de la cláusula "tradicional en todas las reformas del sistema de financiación, conforme a la cual ninguna comunidad autónoma empeora su posición financiera como consecuencia de la reforma". Es la llamada cláusula del statu quo. Además, reivindicaron un sistema "sin privilegios", con las mismas prestaciones independientemente del territorio donde se reciban.

Cantabria no estuvo presente en la cumbre de Oviedo pero reivindica, al igual que el resto de autonomías del Noroeste, "el mantenimiento del statu quo", según aseguraron a LA NUEVA ESPAÑA desde la consejería de Economía y Hacienda del gobierno cántabro. "El fin de cualquier sistema de financiación autonómica es precisamente proveer a las comunidades autónomas de los suficientes recursos para la correcta prestación de los servicios públicos de su competencia. Por eso para Cantabria resulta un principio irrenunciable que las necesidades de financiación deberán tener como límite inferior la financiación real obtenida por cada comunidad autónoma en aplicación del modelo vigente", afirmó el portavoz de la consejería de Hacienda de la comunidad vecina.

En lo que no coincide Cantabria con Asturias, Galicia y Castilla y León es sobre los plazos temporales para abordar la reforma del sistema de financiación. En la declaración de Oviedo, firmada por Javier Fernández, Alberto Núñez Feijóo y Juan Vicente Herrera, se consideraba necesario "impulsar de forma urgente un nuevo modelo de financiación autonómica, tal y como se acordó en la última reunión de la Conferencia de Presidentes". El Gobierno cántabro, por el contrario, prefiere demorar la revisión de un modelo en el que Cantabria es la región más beneficiada. "En estos precisos momentos no se dan las mejores condiciones para llegar a un acuerdo dado que son numerosas las cuestiones que inciden desfavorablemente como el conflicto catalán, la aprobación del Cupo vasco y los recursos por parte del Estado para el nuevo modelo", declaró el portavoz de la consejería de Hacienda de Cantabria a este periódico. El Ejecutivo cántabro sí reclama, al igual que hizo Núñez Feijóo en Oviedo, que el Gobierno central tenga en cuenta la opinión de los presidentes autonómicos a la hora de abordar la revisión del modelo vigente. "Es imprescindible, como no puede ser de otro modo, que sean las propias entidades interesadas, las comunidades autónomas, las que participen en la negociación del modelo de financiación", argumentaron las mismas fuentes.

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