El diputado autonómico del Partido Popular Carlos Suárez ha manifestado esta mañana su sospecha de que el Gobierno asturiano prepara un copago (una aportación económica) para los usuarios de la sanidad. En una rueda de prensa ofrecida en la Junta General del Principado, Suárez ha interpretado de esta manera la noticia, adelantada ayer por LA NUEVA ESPAÑA, relativa a la posible entrega a los pacientes de una factura con el coste de los servicios. Entre tanto, el consejero de Sanidad, Francisco del Busto, ha declarado en Mieres que la implantación de este documento que especifica los costes de los tratamientos "no es una medida coercitiva" y responde a criterios de transparencia, aunque reconoció que también tiene el objetivo de concienciar al ciudadano sobre el gasto que supone la sanidad, que comprenda lo que cuestan sus tratamientos "y tome sus decisiones personales".

Del Busto ha subrayado el compromiso de su Departamento de avanzar en la instauración de un sistema de contabilidad analítica, y precisó que "eso nos permitirá que cada ciudadano sepa, porque tiene derecho a ello y porque es un criterio de transparencia, lo que cuesta su asistencia. Y también lo que cuesta una prótesis, un TAC?". "La contabilidad analítica la tendremos al máximo en los procesos clave, y nos permitirá llegar a incluso poder decirle a cada ciudadano que salga del hospital lo que ha costado su asistencia, o a cada paciente de atención primaria lo que ha costado su atención", ha anunciado el Consejero. "Eso no significa bajo ningún concepto que vaya a ser a corto plazo", ha matizado.

La valoración del PP es muy distinta. A juicio de Carlos Suárez, el Principado "no se atreve" a hacer el anuncio del copago y lo que hace es lanzar un "globo sonda". "Hay un enorme coste y el Gobierno piensa en cómo disuadir a los usuarios, cuestión que inevitablemente nos lleva a pensar que se está planteando el copago", ha afirmado Carlos Suárez.

El diputado del PP ha recordado las críticas que recibió por parte del PSOE cuando planteó la posibilidad de entregar a los usuarios una especie de factura y ha criticado que ahora el PSOE pretenda en Asturias hacer lo mismo. "A mí personalmente me parece una medida ineficaz, no una solución para nada", ha explicado."Mala gestión"

Preguntado sobre si existe actualmente un abuso por parte de los usuarios a la hora de recurrir a los servicios de urgencias hospitalarias, Suárez, cirujano de profesión, ha reconocido que eso es lo que tienden a pensar los profesionales de los centros sanitarios. "Pero eso es lo que piensa una persona que está en un mundo pequeño, como una consulta, pero no es lo que ves cuando sales de ahí y te enfrentas al mundo; entonces empiezas a hablar con la gente y ves que acuden porque tienen problemas reales", ha argumentado.

Lo que sí ocurre, ha señalado Suárez, es que los usuarios no tienen más remedio que acudir a urgencias ante los problemas de saturación de la atención primaria, derivados de una "mala gestión" de los recursos por parte de los responsables sanitarios asturianos.

En su citada visita a Mieres, el consejero de Sanidad señaló que el sistema sanitario público "es un sistema gratuito, que se financia con impuestos, y las polémicas políticas o sindicales las entiendo". Sin embargo, agregó, "hay que dejar claros dos conceptos claves en lo referente al sistema de salud: por una parte, el dueño absoluto del sistema sanitario es el ciudadano, y la transparencia es máxima y debe de ser máxima con el ciudadano. Por ello, la información al ciudadano de cómo se utilizan los recursos en el sistema debe ser una norma, y entre ellas está el coste de los recursos, humanos y económicos", ha apostillado.