Gonzalo Montoya Jiménez, el preso de 29 años que "resucitó" en la morgue el pasado domingo después de ser dado por muerto por dos médicos de la prisión de Asturias y la forense de guardia, volvió a ingresar en la UCI del HUCA a las tres de la tarde de ayer, tras empeorar su estado. Según el padre del recluso José Carlos Montoya, "le ha subido la fiebre y tiene una infección respiratoria; además, le están sometiendo a diálisis para sacarle el líquido que tiene acumulado en el cuerpo".

Montoya se mostró preocupado por el estado de su hijo, que parece no mejorar, pese a que lleva tres días ingresado en el Hospital. "La médica nos ha dicho que estará unos días en la UCI", aseguró este padre. La familia ha puesto el asunto en manos del abogado Luis Tuero, y podrían reclamar una indemnización a la administración, por un evidente mal funcionamiento, que llevó al recluso a ser declarado como fallecido y trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde solo despertó cuando estaban a punto de hacerle la autopsia. La familia quiere además que se le indulte, ya que están convencidos de que si regresa a prisión puede volver a intentar quitarse la vida. Montoya está condenado a tres años y medio de prisión por robar chatarra en la Central Lechera Asturiana, según afirman sus parientes.

Por otro lado, los sindicatos de funcionarios de prisiones negaron que se haya producido una negligencia en este caso, aunque sí admitieron que la forma en que se reparten los medicamentos entre los presos los fines de semana pueden llevar a situaciones como la sufrida por Montoya. Y es que se les facilita toda la medicación de una vez, sin mayores controles, algo que no ocurre por ejemplo en la UTE. Algunos presos llegan a intercambiar las pastillas por otras sustancias.

No obstante, un caso como el de Montoya, dado por muerto por tres médicos, se hubiese evitado con un electrocardiograma, según indicó a Europa Press el coordinador del Grupo de Trabajo de Neurología de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), Pablo Baz Rodríguez, quien no dudó en señalar que, en el caso de la cárcel "ha tenido que haber un mal diagnóstico".