Una avería en el centro de control de tráfico centralizado (CTC) de la red de ancho métrico de Renfe (antigua Feve), situado en El Berrón (Siero) paralizó ayer durante más de dos horas varias líneas de ferrocarril y obligó a realizar transbordos en diferentes puntos de Asturias.

El fallo se registró a las 12.40 horas, cuando el sistema informático del CTC se averió definitivamente (ya había registrado problemas durante toda la mañana). La avería provocó el caos: obligó a la compañía a detener el tráfico ferroviario en la línea Gijón-Laviana, a suspender varios viajes y a recurrir al denominado "bloqueo telefónico" (BT, comunicación entre las estaciones a través del teléfono) en otras líneas, según informaron fuentes de Renfe Red de Ancho Métrico (RAM).

El fallo afectó a las señales luminosas que indican a los conductores de los convoyes si el paso está libre o no. Esta circunstancia mantuvo bloqueados a varios trenes entre estaciones. La avería quedó subsanada a las 15.00 horas, lo que permitió que la circulación se fuera normalizando en los minutos siguientes. Sin embargo, no fue suficiente para calmar los ánimos de los usuarios en la estación gijonesa, que se quejaron del "abandono" que sufre la red.

El primer aviso se dio en el tramo entre Trasona y Candás, pero el problema rápidamente se extendió a otros recorridos. Las líneas afectadas fueron, además de la Gijón-Laviana citada anteriormente, las que unen Gijón con Cudillero y Oviedo con Pola de Siero e Infiesto. La línea Oviedo-Llanes, lo mismo que la que conduce a Santander, no se vio afectada, aunque hubo que realizar transbordos de pasajeros por carretera entre Oviedo e Infiesto.

La avería llevó al diputado de IU Ovidio Zapico a calificar la de ayer de "jornada caótica" para las cercanías. "Cuando no hay cancelaciones por falta e maquinistas es porque el mal estado de conservación de las estructuras, averías de los convoyes o fallos en el sistema de control. Es una vergüenza", señaló Zapico. El parlamentario criticó que el ministro de Fomento visite Asturias "cada quince días para regalarnos los oídos con planes y proyectos", pero "sin inversiones ni plazos". Exigió poner fin a la situación "alarmante y decadente" de las cercanías y dijo que eso solo se consigue "con dinero".