El PP consiguió ayer lo que parecía un imposible: lograr que el PSOE, Podemos e IU se pusieran de acuerdo. Los 28 votos que sumaron los tres partidos de izquierda sirvieron para tumbar la toma en consideración de una modificación de la ley de Patrimonio para flexibilizar y ampliar los usos autorizables de hórreos, paneras y cabazos, una iniciativa que defendía Mercedes Fernández.