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CLARA EUGENIA AGUILERA | Eurodiputada del PSOE y vicepresidenta de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural, mañana participa en Oviedo en una jornada sobre política agraria común

"Los estados deben poner más dinero para financiar la PAC a partir de 2021"

"Ya no hay lugar para el individualismo en la agricultura, hay que asociarse; creo en el cooperativismo y en el futuro del sector agrario"

Clara Eugenia Aguilera García.

Ayer fue el Día de Andalucía, pero la eurodiputada granadina Clara Eugenia Aguilera García, vicepresidenta de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural y miembro de la delegación para las relaciones con Mercosur, con fama de trabajadora infatigable, empezó el día a las ocho de la mañana con un desayuno en Bruselas, para hablar, cómo no, de la espinosa próxima reforma de la Política Agrícola Comunitaria. Volverá a hacerlo mañana en Oviedo, en una jornada sobre el futuro de la PAC, organizada por la Consejería de Desarrollo Rural del Gobierno del Principado, que inaugurará la consejera, María Jesús Álvarez, y en la que también intervendrán Fernando Miranda, director general de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura; Eduardo Moyano, profesor de Investigación y catedrático de Sociología del CSIC; Agustín Herrero, director de Cooperativas Agroalimentarias de España, y Lourdes Zuriaga, presidenta de la Asociación de Periodistas Agroalimentarios de España. Aguilera, nacida en una pequeña pedanía del municipio granadino de Illora, procede de familia ganadera y milita en el PSOE desde 1983. Entre otros cargos, fue consejera de Agricultura en la Junta de Andalucía bajo el Gobierno de José Antonio Griñán y se hizo famosa por su defensa del pepino español en la crisis desatada con Alemania.

- La enésima reforma de la PAC se presenta como una catástrofe. ¿Es de verdad?

-No podemos estar permanentemente cambiando normas sobre la PAC. La anterior reforma se aprobó en 2013 y entró en vigor en 2015. En 2017 volvimos a cambiarla. Ahora abrimos un nuevo debate, muy ligado al presupuesto, con circunstancias que se dan por primera vez: un país importante se marcha y tenemos 12.000 millones de euros menos.

- Entonces el problema financiero está en Bruselas y no en Londres...

-Restando esa aportación y con nuevas políticas y objetivos que cumplir a partir de 2020, como la defensa europea, la atención a los refugiados, el trabajo conjunto contra el terrorismo y el control de fronteras, necesitamos otros 12.000 millones, según dice el comisario de Presupuestos. Tenemos un agujero presupuestario de 24.000 millones.

- ¿Habrá una solución?

-Esto puede resolverse de dos formas: con nuevos recursos presupuestarios si los estados ponen más dinero o simplemente habilitando recursos propios de la UE, a través de impuestos que generen ingresos.

- ¿Qué escenario prefiere?

-Los estados tienen que poner más dinero, y pasar del 0,9% del PIB actual al 1%. Además la UE tiene que dotarse de algunos impuestos propios. Mi opinión como socialista es que no hay que mermar las políticas europeas. Creemos en más Europa y más unidad en la acción política de los estados miembros.

- Queda poco tiempo...

-La propuesta de la Comisión sobre los nuevos presupuestos saldrá publicada el 2 de mayo. Tienen que apoyarla el Parlamento y el Consejo. Si se aprueba en esta legislatura, debe estar lista para marzo de 2019. En diez meses hemos de aprobar el marco financiero plurianual (2021-2027). En junio tendremos la propuesta de reforma de reglamento de la PAC. Será complicado que el presupuesto se apruebe antes de que acabe la legislatura.

- ¿Ve viable un retroceso en el "Brexit"?

-Sinceramente no hay marcha atrás. A la UE no le interesa. Otra cosa son las relaciones y los derechos e intereses de los ciudadanos que deben preservarse al máximo. La UE no puede permitir que se quede un país siempre muy reticente sobre su pertenencia y que hace un referéndum en el que vence el "no" a la Unión por mayoría.

- La anterior reforma de la PAC introdujo el pago por superficie que perjudica a Asturias. ¿Será posible mantener el modelo productivo actual?

-Ése es el objetivo. Debe elegirse bien a los beneficiarios de las ayudas. La PAC se reforma para hacer una política más justa y respetuosa con el medio ambiente. No se ha conseguido aún ni en España ni en el resto de Europa. La actividad agraria sigue siendo la principal en las zonas rurales, no hay alternativa. Si no subsidiamos a los pequeños, serán expulsados del mercado.

- ¿El sector lácteo vive especialmente esa volatilidad de precios?

-Ése es el problema más grave: el baile de precios que no ayuda a mantener la renta agraria. No es cuestión de cambiar los reglamentos de la PAC, es un tema de comercio. Hemos pedido a la Comisión una normativa europea. La ley de cadena alimentaria española tiene buena voluntad, pero no funciona. Los contratos obligatorios, tampoco. Quien compra la leche tiene tanto poder que el ganadero carece de capacidad de negociar. El mercado es europeo, si la norma no es europea no sirve para nada.

- ¿El asociacionismo es la base para conformar un campo más fuerte?

-Hoy ya no hay lugar para el individualismo en la agricultura y en la ganadería. Creo mucho en el cooperativismo. Sin una cooperativa como COVAP, en el valle de los Pedroches (Córdoba), no existirían pueblos allí. En Asturias está Central Lechera. El cooperativismo da valor añadido al ganadero, sobre todo al pequeño.

- Usted estaba al lado del comisario Hogan cuando dijo en Sevilla que la ganadería era un gran negocio para los jóvenes. ¿Está de acuerdo?

-No es fácil abordar el autoempleo para los jóvenes, en ningún sector. Se necesita una financiación, sí. Pero hay mucho futuro en la agricultura y en la ganadería. Es necesario producir alimentos. Ahora hablamos de agricultura de precisión, en la que cada vez existen más instrumentos tecnológicos para producir. La agricultura es bastante más moderna de lo que la gente piensa. Se imaginan el pueblo, la cabaña, la vaquita... uno que la ordeña. Eso no existe ya. Los agricultores de hoy necesitan banda ancha. Yo soy de pueblo y ahora está de moda lo rural, donde está la calidad de vida. Eso sí, la actividad agraria requiere formación previa.

- ¿Cómo se consiguen pueblos atractivos para gente normal, como pide el director general de Desarrollo Rural de Asturias, Jesús Casas?

-A Casas le conozco mucho de su etapa en Andalucía y sé que trabaja mucho por Asturias. A los jóvenes que tienen aspiraciones y ambición no podemos pedirles que vivan sin servicios de educación o sanidad. La política de desarrollo rural no puede hacerse sólo con fondos agrarios.

- ¿El acuerdo entre la UE y Mercosur, en cuya negociación participa, es una oportunidad o un riesgo para Asturias?

-Los acuerdos internacionales ofrecen oportunidades y crean incertidumbre. Los ganaderos de la cornisa no tendrán nada que temer si en la parte agraria exigimos lo mismo al Mercosur. No quiero un acuerdo a costa de Asturias o de los Alpes.

- A esta Comisión le chiflan los tratados internacionales...

-Muchísimo. Es una prioridad del presidente Juncker. Luego nos cuentan que además de eso se hace mucha cooperación al desarrollo y, al final, los problemas internos no se resuelven.

- Empiezan la quinielas sobre una posible purga en la lista socialista a las elecciones europeas de 2019 y no parece situada en el bando agraciado.

-Con una experiencia de cinco años viendo la política europea en directo me doy por satisfecha. Lo que decida mi partido bien estará. Lo que va a pasar no se sabe. En 24 horas cambia todo.

- Lo que no cambia es su amor por el campo.

-Jamás. Quiero mucho al campo y creo en su futuro.

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