Mariano Marín es el elegido para suceder a Gabino de Lorenzo al frente de la Delegación del Gobierno en Asturias. El abogado gijonés de 55 años fue confirmado por el ministro portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, al filo de la una de la tarde de ayer, apenas catorce horas después de que el que fuera hombre fuerte del PP asturiano en la década de entre siglos anunciara por sorpresa su marcha voluntaria de la primera línea de la política regional, un mes y una semana después de cumplir los 75 años, "una buena edad para la jubilación", según escribió en la carta de renuncia que envió el pasado jueves al Presidente Mariano Rajoy. La rapidez en el relevo, una decisión que al Gobierno central le suele llevar semanas, abona la tesis del carácter preventivo de la dimisión como tercera autoridad de la región del que fuera alcalde de Oviedo desde 1991 hasta 2012.

"Mi deseo es hacerlo lo mejor posible", declaró Mariano Marín poco después de confirmar a sus compañeros de grupo en el Ayuntamiento de Gijón que renunciaba al acta de concejal para asumir su nueva responsabilidad como delegado del Gobierno en Asturias. Marín compatibilizará sus tareas institucionales con la presidencia de la Junta Local del PP de Gijón, según confirmó Mercedes Fernández, quien no quiso aclarar que la propuesta del nombramiento había salido de Asturias pero que tiene mucho que ver con la designación del sucesor de Gabino de Lorenzo: la que fuera delegada del Gobierno en Asturias durante la segunda legislatura de José María Aznar ya fue quien dio la alternativa política a Mariano Marín como candidato a la alcaldía de Gijón en 2015.

"Es una persona con la que es muy fácil trabajar (...) es un aire nuevo, una persona equilibrada, ecuánime y que facilita siempre el trabajo por su bonhomía", valoró Mercedes Fernández en los pasillos de la Junta General, nada más conocerse la confirmación del nombramiento por parte del ministro portavoz, Íñigo Méndez de Vigo. La presidenta de los populares asturianos afirmó ayer, a una pregunta de este periódico, que la nueva designación supondrá "un impulso político" para la Delegación del Gobierno. Marín es de su total confianza.

El relevo, que oficializará hoy el Boletín Oficial del Estado con la publicación del nombramiento, ha supuesto mucho más que un largo parto. Las relaciones entre Mercedes Fernández y Gabino de Lorenzo no han resultado fáciles y en los últimos tiempos, prácticamente inexistentes. Gabino de Lorenzo era consciente de que la dirección del PP de Asturias venía reclamando su relevo, de manera cíclica, desde las elecciones generales de junio de 2016. A Mariano Marín ya se le había consultado hace dos meses sobre su disponibilidad para asumir el puesto y en alguna reunión de los órganos regionales del partido se había puesto en tela de juicio la coordinación entre el delegado del Gobierno y el partido. El ya exdelegado tenía claro que dejaría el cargo antes de que concluyera la actual legislatura pero los acontecimientos se precipitaron en el primer trimestre de este año, en el que han sido varios los viajes de Mercedes Fernández a Madrid para participar en reuniones de carácter orgánico, tanto con Mariano Rajoy como con otros altos cargos, la más reciente esta misma semana, con motivo del comité nacional ejecutivo del PP, en el que también estuvo presente Soraya Sáenz de Santamaría, la vicepresidenta de la que dependen las delegaciones del Gobierno. La aplicación del artículo 135 en Cataluña también relegó a un segundo plano el relevo en Asturias,

Hace unos días se sondeó a De Lorenzo sobre su posible salida para que la gestionara de la forma que entendiera más oportuna alguien que ha ganado seis elecciones municipales en la capital de Asturias, cuatro de ellas por mayoría absoluta, y que durante dos décadas fue la referencia de poder del PP en la región.