Candidatos "con gancho, con buena pegada". Éste el requisito que ayer planteó Mercedes Fernández, presidenta del Partido Popular en Asturias, como criterio de renovación de las listas de su formación para las elecciones autonómicas y municipales previstas para mayo de 2019. Según Fernández, los populares disponen de "un gran banquillo" capaz de sintonizar con los ciudadanos, de modo que "permanezcan los votantes de siempre" y sea posible "enganchar a un nuevo electorado".

La presidenta de la formación conservadora se refirió especialmente al triángulo que configuran Oviedo, Gijón y Avilés. Subrayó que el PP, al igual que otros partidos, debe abordar la necesaria adecuación de los candidatos, si bien descartó anticipar nombres. Sí aclaró que, a su juicio, la cuestión primordial no es que sean hombres o mujeres, sino acertar.

Para ello, manifestó su voluntad de ser "lo más persuasiva para conquistar a los mejores candidatos". En las filas del PP se producirá una combinación de renovación y permanencia. Dicho de otro modo, no tienen por qué ser todo caras nuevas. En algunos casos, prosiguió, va a tratar de convencer a los que están para que continúen como alcaldes o alcaldesas, de cara a una campaña que va a ser "muy intensa e importante". Hay que trabajar y escuchar "mucho", enfatizó. De ahí que todos los miércoles vayan con su furgoneta "popular" a escuchar a todos los pueblos de Asturias las peticiones de los asturianos.

Tras la celebración en Gijón de un acto sobre infraestructuras, y a preguntas de los medios de comunicación, Mercedes Fernández aseguró que no hay fecha para establecer quién será el candidato en Oviedo. Incidió en que hay que empezar a trabajar en las apuestas programáticas que hará el PP. "No hace falta a ser un partido nuevo para hacer cosas diferentes", aseveró la dirigente popular.