El cadáver de Onésimo González, el vecino de Llano (Cangas del Narcea) que fue encontrado en la noche de ayer en Puente del Infierno, tras permanecer quince días desaparecido, presenta un cuadro de ahogamiento, según la autopsia realizada por los forenses esta mañana en el Instituto de Medicina Legal. Los forenses, por otro lado, no han encontrado lesiones de defensa, que hubiesen indicado una muerte de carácter violento. La Guardia Civil sostiene por el momento que se trata de una muerte accidental, al caer al río, y que nada indica otras hipótesis. González tenía 43 años.

El cuerpo fue encontrado por uno de los voluntarios integrantes del grupo de ciudadanos que salieron a rastrear el río durante el día de ayer. El hallazgo se produjo a última de hora de la tarde, cuando la búsqueda se daba por finalizada. Los bomberos fueron los encargados de recuperar el cuerpo, en unas labores que se desarrollaron ya entrada la noche.

En la mañana de ayer, un voluntario del grupo de ciudadanos que se movilizaron para rastrear el río en apoyo al trabajo que está realizando la Guardia Civil habían encontrado un pantalón de chándal de hombre que las autoridades decidieron recoger para analizar, al asegurar uno de los vecinos de Llano que no era extraño ver al desaparecido con ropa de deporte. El hallazgo del pantalón se produjo en el tramo del río entre los pueblos de Corias y San Pedro de Corias. El lunes ya se había encontrado una caña de pescar que rápidamente fue identificada como propiedad de Onésimo González. En este caso, se recogió a tan solo 300 metros de la casa del hombre, donde residía con su hermano.