Las tres acusadas de falsificar 4.600 euros en billetes de 20 y 50 han admitido esta mañana en la sección segunda de la Audiencia Provincial que colocaban, de forma "puntual" y "por necesidad", la moneda falsa, pero que nunca trataron de introducir en el mercado los billetes que habían intentado falsificar en su casa con una fotocopiadora, porque eran "de mala calidad".

Una de las acusadas ya fue juzgada y condenada en su día por falsificación. Se trata de mujeres que han estado relacionadas con la venta ambulante. Dos de ellas residían en el barrio ovetense de La Tenderina. Fue allí donde la Policia encontró los billetes falsos incautados. Allí también estaba la fotocopiadora usada por las acusadas, aunque ellas han dicho que eran para las cosas del colegio de la niña o para fotocopiar el carné de identidad.

Las acusadas admitieron que en ocasiones compraban los billetes falsos, los de 50 euros a 25 o 30, los de 20, a 5 o 10. Luego los intentaban colar, pero muchas veces no se los aceptaban, por lo que ellas, "amablemente", devolvían la compra y se iban.

La Policia inició las investigaciones al detectar un gran número de billetes falsos en el Principado, según indicó un inspector de la brigada de investigación del Banco de España. Las acusadas se enfrentan a 11 años de cárcel cada una.