Los asturianos deberán generar un 10 por ciento menos de basura y alcanzar una tasa de reciclaje del 50 por ciento. Esos son los objetivos que persigue el nuevo plan estratégico de residuos del Principado hasta el año 2024, aprobado ayer por el Consejo de Gobierno. Cuenta con un presupuesto estimado de 118,3 millones de euros. "Estamos ante un problema de nuestro tiempo y los objetivos deben ser cada vez más exigentes", aseguró el consejero de Infraestructuras Fernando Lastra, quien resaltó que se trata de "un plan de Asturias y para Asturias en el que todos debemos estar comprometidos, instituciones, industrias y ciudadanos. Del grado de ese compromiso dependerá el éxito del plan".

La nueva estrategia prevé implantar la recogida separada de biorresiduos domésticos y comerciales; es decir, los que se generan en la preparación y elaboración de alimentos, así como los restos vegetales.