El Parque de Somiedo ha sido escenario en este puente festivo del 1 de mayo de un auténtico furor por la observación de osos, una actividad de turismo activo que va a más en los últimos años y que esta primavera es mucho más fácil para alegría de visitantes y empresarios.

Y es que los animales despiertan tras su hibernación hambrientos, lo que les obliga a movilizarse en busca de comida. Algo habitual en el ciclo vital de los osos, pero que se les ha complicado esta primavera en Asturias, retrasada y aún con el manto blanco en las zonas altas. Las dificultades para hallar alimento obligan a los plantígrados a moverse más, lo que les deja más expuestos a los prismáticos y teleobjetivos de los muchos visitantes que se acercan a las zonas oseras a observarlos.

Así las cosas, en el valle del Pigüeña una hembra, un macho y tres crías hicieron las delicias de los muchos que se acercaron a la zona del repetidor de Robledo para avistar osos este puente. Los afortunados se echaron un buen rato disfrutando de las imágenes del grupo, expuesto a las miradas sin mayores problemas. Algo que contribuye también a localizar más fácilmente a los animales es la subida del número de ejemplares.

Este periodo vacacional ha resultado mejor de lo esperado en Asturias. Pese al mal tiempo del fin de semana ha habido oportunidad de disfrutar del sol en la recta final. Ayer los turistas afloraron por toda Asturias para alegría de hosteleros y empresarios en general. Sin ir más lejos, así sucedió en el citado Parque de Somiedo, inmerso en el 30.º aniversario de la declaración como espacio protegido.

En muchos establecimientos han colgado el cartel del completo, en otros, algo menos. Pero el sector somedano coincide en señalar que las estancias se alargarán, además, lo que queda de semana. Mucho visitante procede de Madrid, donde hoy mismo es aún fiesta, ya que celebran el Día de la Comunidad. Esto ha propiciado que algunos alarguen las vacaciones y enlacen hasta el próximo fin de semana.

Con todo, los que sigan de vacaciones en Asturias no podrán disfrutar hasta el sábado al menos de un día soleado como el de ayer. Las previsiones son que hoy mismo empeore, con cielos cubiertos y lluvias generalizadas, que comenzarán por el Occidente y se extenderán hasta el Oriente. Además, vuelve la nieve: la cota estará en torno a los 1.200 metros hasta el viernes y helará en las montañas. No hay que olvidar, por tanto, el paraguas, aunque quizás los abrigos puedan ir guardándose pues las temperaturas comenzarán a recuperarse, si bien de forma lenta y ligera.