Mucha gente dice que sabe escanciar sidra pero, en realidad, pocos pueden presumir de saber hacerlo de forma correcta. La pregunta cada vez que alguien llegado de fuera de Asturias llega al Principado y pide una botella de sidra está clara: ¿cómo se escancia la sidra?

Ya avisamos: la respuesta no es sencilla. En esto, como en todo, cada maestrillo tiene su librillo. Lo que recomiendan, eso sí, los camareros que más saben de esto es ensayar con agua. La sidra no está para desperdiciarla y los que escancian mal "tiran demasiado al suelo".

Cómo escanciar el culín perfecto

Cómo escanciar el culín perfecto

El escanciador ha de coger la botella de la mitad hacia abajo. El dedo meñique tiene que estar en el culo de la botella y la etiqueta debe quedar siempre visible al público. El corcho también tiene que sujetarse con la misma mano de la botella. El vaso es el otro 50 por ciento que determina el éxito del escanciado. El camarero lo tiene que coger por abajo, con los dedos índice y pulgar. El dedo anular también está permitido siempre que esté pegado al índice a la hora de escanciar. Se coloca a la altura de la pelvis, casi pegado al cuerpo. El ángulo de inclinación ideal oscila entre 30 y 50 grados. Las piernas permanecerán ligeramente abiertas.

Preparados...

Cuando el escanciador esté preparado, levantará la botella por encima de su cabeza y mantendrá el brazo estirado y la mirada fija en el vaso mientras sirve la sidra. Además, se valora que el chorro de sidra sea uniforme y continuo, que rompa justo en el borde del vaso y que la espuma formada desaparezca pronto. Para cortar el chorro, basta con realizar un leve toque de muñeca de la mano que sujeta la botella. Cualquier movimiento del vaso será penalizado en todos los concursos de escanciadores.