La futura ley del Deporte que elabora el Principado incluirá sanciones, además de medidas educativas y de prevención, para atajar la violencia y el racismo en los campos y canchas de juego. Ese régimen sancionador se concibe como "un elemento de corrección severa ante conductas inapropiadas", aseguró ayer el consejero de Educación y Cultura, Genaro Alonso, para luego pedir al resto de grupos parlamentarios que apoyen el texto para que se pueda aprobar "cuanto antes".

El capítulo más reciente de violencia en el fútbol asturiano se produjo hace sólo unos días, cuando un joven de 15 años, jugador en Segunda Cadete en el Veriña Club de Fútbol, agredió al árbito durante el partido contra el Club Deportivo Arenal C, que se disputó en el campo del Tragamón. Según recoge el acta del partido, el menor amenazó de muerte al árbitro, le golpeó en el pecho y le llamó "hijo de puta" en reiteradas ocasiones. Tal fue el conflicto que hasta tuvo que intervenir la policía. También el padre del futbolista agresor intervino en los hechos. El jugador ha sido expulsado del club.

El Consejero señaló que en el Gobierno regional existe preocupación por las "manifestaciones periódicas de violencia en los campos de fútbol", y destacó que por eso ya se impulsaron en la temporada pasada campañas como "Tarjeta negra, entra en juego", además de otras iniciativas de carácter preventivo y educativo con clubes y federaciones. Pero también señaló que muchas conductas violentas exceden sus competencias.

La diputada de IU Concha Masa remarcó que su grupo parlamentario considera que "entre tanto se aprueba la ley de Deporte, se podrían tomar medidas para estimular positivamente a los clubes o federaciones que fomenten la deportividad en su sentido más amplio y positivo".