La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

MANUEL GERVILLA | Ingeniero de perforación con experiencia en multinacionales

"En el Cantábrico hubo hasta treinta pozos de explotación petrolífera"

"Los hidrocarburos líquidos no se están agotando, pero sí hay que ir a buscarlos a sitios cada vez más remotos"

Manuel Gervilla, en una de sus estancias en el extranjero. E. M.

Oviedo, C. JIMÉNEZ

Manuel Gervilla, ingeniero de perforación con dos décadas de experiencia en compañías internacionales (Repsol, Maersk Oil y OMV), explicó esta semana en la Escuela de Minas cómo se diseña un pozo para la exploración y producción de hidrocarburos dentro del ciclo de conferencias organizadas conjuntamente por la Universidad de Oviedo y el Instituto Geológico y Minero. Gervilla es responsable de ingeniería y gestión de proyectos de desarrollo de campo, nuevos negocios y exploración, tanto offshore (España, Brasil, Cuba, Dinamarca, Noruega y Angola) como onshore (Egipto, Argelia, Kazajistán y Rumanía). Dentro de su dilatada experiencia, ha sido jefe de ingeniería y operaciones en Kazajistán, Noruega y Rumanía; director global de la disciplina de perforación con Maersk Oil. Es ingeniero de minas por la Escuela de Oviedo y MBA en Copenhague Business School.

-¿Qué dificultades entraña la exploración para la explotación de hidrocarburos?

-Los hidrocarburos se encuentran por todo el mundo. Al principio se hallaron los que estaban más a simple vista. Llevamos 150 años trabajando en ello y ahora los estamos buscando en el Ártico, en Groenlandia, en zonas del golfo de México, en el Atlántico, en los desiertos, en sitios muy muy remotos... Es una industria altamente tecnológica porque es muy difícil llegar a ellos. Hasta el año 2012 o 2013 tuvimos un sistema en la exploración de hidrocarburos hasta que los americanos hallaron un método que vuelve a las bases de hace 10 años y ahora tienen petróleo muy fácil de encontrar.

-¿Más superficial?

-Digamos que es diferente. El petróleo se encuentra en trampas del terreno y hay que identificarlas. Unas veces se escapa, otras crees que hay, pero no. En cambio ahora se tiende a ir a la roca madre, que es la fuente de los hidrocarburos y hay muchísima y muy fácil de identificar. Para poderlos extraer hay que romper la roca, hacer factura y eso implica grandes inversiones pero es fácil de explotar, con lo cual hay un cambio de paradigma en la industria en los últimos cinco o diez años.

-¿La búsqueda en lugares remotos implica que se están agotando los recursos existentes?

-Los hidrocarburos líquidos, los convencionales, no se están agotando pero sí hay que buscarlos en sitios cada vez más difíciles. Con la técnica del fracking los recursos se han incrementado exponencialmente, o sea, que eso de que el petróleo se acaba ha pasado a la historia. Nadie en esta industria habla de que el petróleo se vaya a acabar sino que dejaremos de usar el petróleo no por falta de él sino porque cambiaremos a otro tipo de energía, mucho más limpia.

-¿Cuál será la próxima fuente de energía?

-Ahora estamos yendo mucho al gas natural porque es una energía limpia, también abundante, disponible en cantidad suficiente, que se puede transportar fácil y ya podemos contar con gas renovable. Creo que el petróleo se usará para industria petroquímica, los plásticos, los aviones... todo lo que no puede usar otras energías.

-¿Existen diferencias en las formas de exploración de hidrocarburos de unos países a otros?

-En España somos muy buenos en el petróleo. Repsol y Cepsa son muy buenas empresas a escala mundial, también Gas Natural en su ámbito, con métodos modernos y alta tecnología. Yo creo que no hay diferencias por países. Se trabaja igual en el mar del Norte, en los desiertos o en la selva. Sí es cierto que en España, como la industria es más reducida [se consumen 1,2 millones de barriles de petróleo y se producen 8.000 barriles], tenemos menos reconocimiento que en otros países como Reino Unido, Francia o países escandinavos.

-¿Cómo se responde ante la contestación que presenta en la ciudadanía determinados métodos de extracción de hidrocarburos?

-Los perforadores somos los que ponemos la tubería desde el lugar dónde está el petróleo hasta superficie y en 25 años que llevo trabajando en todo el mundo nunca he tenido ningún problema de ningún derrame, de ninguna explosión. Son todas empresas limpias, con alta tecnología, que se preocupan por no crear impacto social ni en el medio y, en cambio, a veces te encuentras con una oposición frontal a la fracturación hidráulica o a cualquier cosa que huela a petróleo o gas.

-¿En Asturias hay posibilidades de explotación de hidrocarburos?

-Es una de las grandes desconocidas. En el offshore, en el Cantábrico habrá unos 20 o 30 pozos que se hicieron en los años setenta y ochenta, con plataformas, a grandes profundidades, con tecnología muy antigua y nunca ha habido ningún problema. Trabajamos con sistemas de seguridad redundantes, lodos sin toxicidad, plataformas con descarga cero...

-¿Por qué no se explotaron esos pozos?

-Hubo algún pequeño descubrimiento. Pero para explotar el petróleo necesitas cierto tamaño. En España eso se descubrió cerca de Bermeo, en una zona que ahora es un almacenamiento subterráneo que opera Enagás y hubo un descubrimiento también marino en las costas de Tarragona y otro en el golfo de Cádiz. En el Principado no se encontró tamaño pero sí había permisos, los que llamamos convencionales, para trabajar sobre roca madre.

-¿Resulta más complejo trabajar onshore u offshore?

-Offshore tiene la complejidad de que estás en el medio del mar, en espacios reducidos, pero un sondeo en medio del desierto de Sahara es igual. La tecnología lo ha superado todo. Al final el proceso de diseño es prácticamente el mismo.

Compartir el artículo

stats