La escalada de la tensión entre Cristina Coto y la dirección del partido de Francisco Álvarez-Cascos tiene tres posibles salidas: la expresidenta sigue en el grupo parlamentario, se marcha al Grupo Mixto o renuncia a su acta de diputada.

Ni Coto, que ayer estaba visiblemente emocionada nada más anunciar su dimisión, ni su compañero de bancada, Pedro Leal, dieron nada por hecho. El diputado no quiso "mojarse" al ser preguntado sobre el futuro inmediato de la expresidenta de Foro y recalcó que su dimisión era una decisión "personal y voluntaria". La expresidenta forista, que ya renunció a su acta de diputada cuando decidió dejar el PP para integrarse, meses más adelante, en el proyecto de Foro tiene a su alcance un botón "nuclear" cuya activación supondría un gran perjuicio para el partido: pasarse al Grupo Mixto. Esa decisión acarrearía la pérdida de gran parte de la asignación económica anual que recibe Foro ya que la formación casquista al perder un escaño dejaría de tener grupo propio. Si Cristina Coto se separase de Foro para ir al Grupo Mixto se daría una situación cuando menos curiosa: tanto ella como sus hasta ahora compañeros tendrían que compartir la asignación y los medios que la junta de portavoces decidiera ante el nuevo estado del arco parlamentario. Los grupos parlamentarios reciben una cantidad fija para su funcionamiento y otra variable en función del número de diputados con los que cuenta. Tanto Foro como Ciudadanos, que cuentan con tres parlamentarios, reciben una asignación anual de 326.160 euros, que suponen la principal vía de financiación del partido, además de contar con cinco puestos de eventuales. Una cifra que Foro vería menguar si Coto decide irse al Grupo Mixto.