E. CAMPO

Diego Fontecha es el ejemplo de joven emprendedor metido de lleno en el mundo de las nuevas tecnologías. Socio fundador de la empresa Dolphin, dedicada a multimedia y audiovisuales, ofrecerá esta tarde una charla titulada «Una profesión multimedia», que organiza el Club LA NUEVA ESPAÑA. Será a las ocho de la tarde en la Casa de Cultura. Fontecha abandonó sus estudios de Derecho para dedicarse a su vocación, la imagen y el sonido.

-¿A qué se dedica una empresa audiovisual?

-En Asturias se realizan vídeos para empresa y audiovisuales divulgativos para organismos. Pero nosotros también trabajamos con multimedia: páginas web y e-learning, formación a través de internet. Desarrollamos una plataforma que vendimos a empresas como Aceralia, Ferrovial e Iberdrola. Y dotamos a esas plataformas de cursos de todo tipo. Ahora nuestro objetivo es realizar documentales.

-Pese a la fuerte implantación de internet en la vida cotidiana, muchas entidades siguen sin tener página web...

-Hay empresas que ni siquiera tienen correo electrónico; es alucinante. Hay un gran nicho de mercado. Al principio se valoraba mucho tener una página web, las empresas estaban dispuestas a pagar más. Ahora se ha abaratado y existen dos tipos de clientes: los que quieren un producto bueno y otros que lo quieren barato. De hecho, puedes encontrar quien te haga una web por 100 euros.

-¿Qué debe exigirse a una buena página web?

-Es primordial que sea accesible, capaz de ser visionada en cualquier tipo de explorador. Que permita a las empresas actualizar los contenidos sin tener conocimientos informáticos. Además hace falta buen diseño.

-¿Qué beneficios reportan?

-Internet es el canal de comunicación en expansión por excelencia. Permite tener información de una empresa actualizada, sin que sean necesarios los catálogos de papel. También es fundamental para darse a conocer. Y permite la venta directa.

-¿Se puede vivir de las tecnologías de la comunicación y la información?

-Claro, se puede vivir. Nosotros llevamos desde 1996 viviendo de ello, primero como departamento de una empresa de formación, y como empresa autónoma desde el 2000. Somos cuatro trabajadores: dos socios y dos contratados. Hay muy poca oferta de profesionales, debería haber mucha más.

-¿Hay techo para las nuevas tecnologías?

-Todavía estamos empezando. Cada vez hay más cosas cotidianas que se pueden hacer con las tecnologías de la información y la comunicación. Estamos en pañales. Uno de los grandes cuellos de botella es la reticencia de las personas a usarlas. Es algo endémico, hace falta que vengan nuevas generaciones. Se puede explotar mucho más el teletrabajo, las compras por internet...

-¿Internet hará desaparecer la televisión?

-No, Internet va a absorber la televisión. Ya está a la vuelta de la esquina un único electrodoméstico que aglutine internet, televisión, telefonía y videoconferencia. La videollamada será una realidad en muy poco tiempo.