La Feria avilesina del saldo y los stocks cerró ayer su novena edición con números positivos, según la organización: 21.930 visitantes, un diez por ciento más que el año pasado, y un nivel de ventas calificado, sin más cuantificación, como «muy bueno». El certamen tiene como finalidad facilitar a los comerciantes la liquidación de artículos de temporada y a los clientes beneficiarse de descuentos y precios de ganga que, de otra forma, serían impensables.

Heriberto Menéndez, responsable de eventos feriales de la Cámara de Comercio de Avilés, la institución que junto a la Unión de Comerciantes pone en pie cada año dos ediciones de la Feria del saldo (verano e invierno), destacó la satisfacción de los 54 empresarios que participaron en el certamen por haber podido mostrar sus mercancías a mieles de personas y, en muchos casos, cerrar ventas en cantidades apreciables.

Se da la circunstancia de que esta feria fue la última que se celebrará en el pabellón municipal de La Magdalena con el recinto en condiciones primitivas. En agosto se reestrenará el pabellón, mejorado y ampliado gracias a las obras que se ejecutan hace meses y que este fin de semana apenas causaron trastornos al desarrollo de la Feria del saldo.