L. M. A.

Infoinvest, sociedad que gestiona el Parque Empresarial, asegura que no existe posibilidad de restitución de las parcelas que quedan por vender a los herederos de los expropiados por Ensidesa debido a que resultaría imposible determinar su origen como consecuencia de la nueva agrupación del polígono industrial y a que se ha producido en ellas la acción urbanizadora. Carlos Robles, delegado de Infoinvest, descartó que ese suelo, menos de un 10 por ciento del Parque, esté sujeto a cualquier tipo de inseguridad jurídica, en contra de lo que el Partido Popular ha expresado como una preocupación.

Robles explicó que si esa posibilidad hubiera existido en algún momento, las parcelas no se habrían podido vender, como hasta ahora, sin ningún problema, ya que figurarían en el registro de la propiedad con una inscripción sobre las limitaciones del derecho de propietarios. Los populares han sostenido, sin embargo, que las reclamaciones sobre esas fincas donde no se ha construido podrían poner en riesgo el futuro desarrollo de lo que resta del polígono de la ría.

El futuro -presumiblemente largo- queda despejado para que la Administración del Estado asuma las indemnizaciones que se deduzcan como consecuencia de los derechos de reversión ganados hasta ahora en los tribunales por los herederos de los expropiados en la década de los cincuenta. De esa manera, en la peritación del justiprecio habría que tener en cuenta el incremento del IPC durante todos estos años y, según Infoinvest, descontar las inversiones que se han hecho en los terrenos.

La única oferta que existe hasta ahora por parte de la Administración es de 12 euros por metro cuadrado, que ya han rechazado algunos de los herederos de los expropiados, a los que la Delegación del Gobierno impidió en 1999 ejercer los derechos de reversión sobre las parcelas, al no informarles debidamente de que podían optar a su recompra con motivo del proyecto del Parque Empresarial.

En cuanto al suelo donde se prevé el Niemeyer y el resto de equipamientos, la Administración, para disuadir a los herederos de los expropiados de los derechos de reversión, expuso en su día que los solares permutados con la Autoridad Portuaria, cercanos a las orillas de la ría, siguen teniendo el destino útil o de interés general por el que se expropiaron en la década de los cincuenta del pasado siglo.