L. M. A.

El concejal Manuel Peña, candidato del PP a la Alcaldía en las dos últimas elecciones, y la presidenta popular de Morcín, María Teresa Álvarez, coincidieron ayer en señalar que la destitución del primero por apoyar públicamente a la ex parlamentaria Alicia Castro es la prueba fehaciente de que la libertad de expresión es perseguida dentro del partido. Peña fue apartado de su cargo de portavoz por expresar públicamente apoyo a Alicia Castro como candidata a presidir el PP asturiano.

Ambos animaron a la diputada Carmen Rodríguez Maniega a someterse a una cura de humildad después de las declaraciones de esta última, que se puso de ejemplo de la renovación en el PP, criticando a Castro por pedir libertad de expresión y decir que ella sabe cómo ganar elecciones.

Peña recordó que había sido él quien brindó a Maniega la oportunidad de entrar en la política formando parte de la lista municipal que él mismo encabezó en 2003 y de afiliarse ese año al Partido Popular. María Teresa Álvarez explicó que si Rodríguez Maniega tenía un escaño en el Congreso no era por haberlo ganado en las urnas, sino de «carambola» al haber renunciado a él Gabino de Lorenzo. «Alicia Castro fue, sin embargo, la primera mujer de Asturias en ganar unas elecciones generales. Esta chica, que hace honor asturiano a su apellido (Maniega) con sus declaraciones, no tiene categoría para medirse a una persona con tantos años de militancia, honradez y trabajo a sus espaldas».

La presidenta del PP de Morcín ironizó también sobre la ejemplificación de juventud y renovación que se había arrogado la diputada avilesina. «A los 43 años no se es joven ni vieja, se es añosa», dijo.

Manuel Peña quiso recordarle a Maniega que ella formó parte de la lista de 2007 que él encabezó y perdió las elecciones, de la misma manera que lo había hecho en 2003 cuando se ganaron. La concejala y diputada había reprochado a su compañero de Corporación el hecho de haber perdido las últimas elecciones municipales. Para abundar más, el ex portavoz destituido del PP explicó cómo él había formado parte en 2004 de una candidatura al Congreso que ganó las legislativas en Asturias, mientras que ella había participado en las que perdió, este año. «Otra cosa es que obtuviese el escaño por las circunstancias que todos conocemos. En esta vida hay que ser persona, leal y agradecida. Maniega sólo lo es a su presidente Aréstegui».

María Teresa Álvarez recordó, además, cómo a Maniega se la conocía por haber sacado a relucir a una supuesta novia de la alcaldesa, Pilar Varela, faltándole el respeto a ella y a otras muchas mujeres. «Con personas como Maniega las mujeres no necesitamos enemigos», apostilló.