Amaya P. GIÓN

Soto del Barco,

Tráfico ha expedientado desde el pasado 2 de diciembre, -cuando entró en vigor la reforma del Código Penal en materia de seguridad vial-, a 297 conductores en las carreteras asturianas por circular con tasas de alcohol superiores a los 0,60 miligramos por litro de aire expirado. Dieciocho de ellos, el seis por ciento, sobrepasaron el doble de la tasa permitida.

El delegado del Gobierno en Asturias, Antonio Trevín, facilitó ayer estos datos en el marco de la primera reunión de coordinación de las jefaturas provinciales de Tráfico de Castilla-León, Galicia, Cantabria y Asturias, que se celebró en el Palacio de la Magdalena de Soto del Barco. Apuntó que nueve conductores, todos ellos hombres, se encuentran en medio de un proceso penal por circular sin carné en los últimos días, siete de los cuales nunca contaron con permiso de circulación.

Hasta el día de ayer se han detraído en Asturias 109.786 puntos, el cincuenta por ciento por infracciones relacionadas con el exceso de velocidad y el alcohol. Le siguen en el ranking el uso del teléfono móvil al volante (11.000 puntos retirados) y la conducción sin cinturón o casco (8.000 puntos). De los 278 conductores que desde 2006 han perdido el carné de conducir, sólo trece fueron mujeres. En cuanto a los delitos relacionados con el exceso de velocidad, el más grave fue el de un conductor detenido por circular a 133 kilómetros por hora en una vía limitada a 50 y otro que fue sorprendido a 195 kilómetros por hora en un límite de 80.

El delegado del Gobierno apuntó que se ha producido un «salto cualitativo en la mejora de la accidentabilidad del tráfico y, sobre todo, de la concienciación de los conductores» desde la entrada en vigor del carné por puntos y el endurecimiento de las penas por delitos relacionados con la seguridad vial. Aún así, apostilló, «nunca podemos estar satisfechos en este sentido y seguimos haciendo un llamamiento para profundizar en la concienciación».

En el balance estuvieron presentes, además, el jefe provincial de Tráfico de Asturias, Ignacio Campomanes (apuntó que 281 alumnos han participado en el Principado en 45 cursos de recuperación de puntos); el subdirector general de Educación, Divulgación y Formación Vial, Antoni Rui de i Rovira de Villa, y la directora del Observatorio de Seguridad Vial, Anna Ferrer Jiménez.

Antoni Rui reconoció, en cuanto al cumplimiento de las penas en materia de seguridad vial, las dificultades que se están planteando en el caso de las alternativas a la cárcel, como son los trabajos en beneficio de la comunidad: «No hay dificultades en el caso de las penas de multa y de la suspensión de permisos, aunque sí en las de cárcel, que son sustituidas por penas alternativas. Pero no es exclusivo de las cuestiones en materia de Tráfico, sino también en el resto de delitos», apuntó. Ferrer Jiménez, por su parte, destacó que se desarrollarán sistemas informáticos para mejorar la recogida de datos disponibles para el análisis de la accidentabilidad y que, además, se incorporará a las Policías Locales en este sistema. Señaló que el perfil generalizado del infractor al volante responde a varones, de medio o alto nivel adquisitivo, con estudios, y de mediana edad. La accidentabilidad ha disminuido entre los jóvenes muy por debajo de la media, al contrario que entre los conductores con edades comprendidas entre los 35 y los 55 años.