Juan C. GALÁN
El Real Avilés Industrial cumple un cuarto de siglo de historia. El pasado sábado, día 10, los socios del Club Deportivo Ensidesa y del Real Avilés decidían, con sus votos, la unificación del fútbol avilesino. La fusión entre los dos grandes clubes de la ciudad será recordada y debatida en el Club de LA NUEVA ESPAÑA que se celebra desde las 20.00 horas de esta tarde en el auditorio de la Casa de Cultura de Avilés.
En la mesa, varios de los nombres propios de un proceso que cambió el deporte local: Manuel Ponga Santamarta, alcalde de Avilés en el momento de la fusión; Jesús Llera Arrojo, presidente del Real Avilés; Víctor Martín, vicepresidente del club blanquiazul; Cándido González, vicepresidente del Club Deportivo Ensidesa; Laureano Poyo, que fue periodista deportivo en aquella época; Francisco de Asís Álvarez, «Quico», capitán del Ensidesa; José Rafael Viña, portero del Real Avilés, y Jorge Valverde, coautor del libro «Avilés y su fútbol».
Todos ellos recordarán cómo se gestó una fusión, aprobada por 142 votos de diferencia (742 socios ejercieron su derecho a voto), que pretendía dar un impulso al balompié avilesino. El objetivo: llegar cuanto antes al fútbol profesional. La prolífica cantera del Ensidesa ponía los pilares deportivos al proyecto. La afición y la solera del Real Avilés lo dotaba de masa social. Tras dos temporadas amargas, el Real Avilés Industrial logró el ascenso a Segunda A en 1990. Dos años más tarde, el club se convertiría en sociedad anónima deportiva.
