Rubén SAMANIEGO

La peonza, el aro y la rana fueron protagonistas ayer en la plaza de Carbayo, dentro de una de las actividades programadas por «Esbardu». Comenzó la tarde celta entre juegos populares, que congregaron a mayores y pequeños frente a la iglesia vieja de Sabugo. Fernando López, uno de los asistentes, se acercó hasta la plaza de Carbayo en compañía de su nieta Carla. «Me vienen muchos recuerdos a la cabeza viendo todos estos juegos. Los niños de hoy en día no saben valorar estas piezas», indicó López mientras enseñaba a su nieta a montar en los zancos. «Me gustan mucho», comentó la niña. En otro lado de la plaza un grupo de niños se arremolinaban en torno a otro de los juegos: la rana. Este juego de precisión, que consiste en lanzar una ficha y conseguir introducirla en varios agujeros, llamó la atención a los allí congregados. También Mark Krolikowski y Rubén González pasaron la tarde entre juegos. «Aunque aprendí a jugar a la peonza hace cuatro días, me gusta bastante», comentó Mark, mientras intentaba una y otra vez hacerla «bailar».

Más tarde la plaza Carbayo acogió un taller de baile, que congregó a gente de más edad, hasta el momento que los de Juan Casas tuvieron que refugiarse en la iglesia vieja de Sabugo para que sus actividades no colisionasen con las de «Beltaine»: en el exterior de la plaza se hizo oír el grupo folclórico «San Félix» de Valdesoto. Mientras, la iglesia acogió la actuación de la Banda de Gaitas «Charamusca» de la vecina Galicia, que actuó por segunda vez. En el mismo escenario sorprendió con su presencia el famoso gaitero asturiano Xuacu Amieva, para dejar su huella en el Intercéltico de «Esbardu». El público, que llenó prácticamente el aforo, jaleó y ovacionó su actuación, al igual que lo hizo con la de los gallegos, que volverían a actuar para cerrar la noche del jueves con su espectáculo musical «Bruxas e meigas».

El «Beltaine» celebró en la mañana de ayer un nuevo taller de construcción de instrumentos con material reciclado en Hermanos Orbón, y por la tarde continuó el festival de ajedrez en la calle. La parte musical del día comenzó a las ocho, con la actuación de la Asociación Batulax. La agrupación asturiana deleitó con un concierto didáctico, en el que una narradora contó el papel de la mujer a lo largo de la historia en el Principado, mientras un grupo de mujeres interpretó las piezas, que consiguieron la ovación de los asistentes. Mari Carmen Fernández, una de las espectadoras, aseguró «estar disfrutando con la actuación» ya que era la primera vez que asistía al festival. El broche de la jornada lo puso la actuación de los escoceses «Lau» y los asturianos de «La Bandina».