T. C.

Los vecinos de la zona centro de la ciudad y del barrio de Jardín de Cantos aplaudieron ayer la alternativa que ahora sopesa Fomento para eliminar la barrera ferroviaria y construir la conexión del puerto con la Autovía del Cantábrico, sobre todo porque, definitivamente, destierra de la ciudad las vías del tren.

«La propuesta es satisfactoria y consideramos que es una buena decisión; la sensatez imperó. Siempre apostamos por eliminar la barrera ferroviaria sin recurrir a eufemismos. Además, no creo que nadie ponga inconvenientes por soterrar las vías a la altura de Raíces. Ya está bien de frivolidades entre los políticos, ¿qué es, que quieren perder otros diez años mareando la perdiz?», aseguró ayer Antonio Cabrera, presidente de la Asociación de Vecinos de Jardín de Cantos. Su homólogo en la entidad vecinal «Pedro Menéndez», Iván Álvarez Heres, calificó de positiva la noticia. «Lo que ahora es imprescindible es que esa alternativa salga adelante. Si realmente se quiere unir la ciudad y la ría se tienen que quitar las vías del tren y, ésa es una solución plausible», comentó Álvarez Heres.

No obstante, ambos dirigentes vecinales instaron a las administraciones implicadas a ofrecer «cuanto antes» tanto plazos para ejecutar la obra como presupuesto. «Esperemos que no se quede como otros proyectos, que fueron mera declaración de intenciones», apuntó el presidente de los vecinos del centro.

Antonio Cabrera aprovechó la ocasión para pedir, si finalmente tanto Fomento como el Principado de Asturias optan por esa alternativa, que el Ayuntamiento de Avilés sopese la posibilidad de recepcionar la carretera nacional N-632 a su paso por la ciudad. «Sería el momento oportuno, ya que ya no cruzarían por la ciudad los camiones que salen del puerto de Avilés», explicó el presidente de la Asociación de Vecinos de Jardín de Cantos.