V. MONTES

El Ministerio de Fomento estima que el proyecto para eliminar la barrera ferroviaria de Avilés no estará ejecutado hasta al menos pasados diez años. Estos son los plazos que sopesan en sus conversaciones el Gobierno central y la administración del Principado, a la vista de los trámites burocráticos necesarios para desarrollar la iniciativa. No obstante, el Ayuntamiento confía en que esos plazos se acorten.

La visita del jueves del secretario de Estado de Infraestructuras ha dejado su resaca. De forma consciente, Víctor Morlán calló cifras y plazos, pero eso no significa que no los haya en las previsiones de ambas administraciones, no como compromiso sino a modo de orientación. Tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA, el coste estimado de la nueva ronda ferroviaria superará los 250 millones de euros. En cuanto a los plazos, Fomento estima que en el mejor de los casos no empezaría a haber obras hasta pasados cinco o seis años.

La cuenta no es complicada. El Principado y el Gobierno central dejarán pasar el próximo 2010 para acabar de perfilar el trazado definitivo, una vez realizados ciertos estudios geológicos. Una vez decidido el trayecto, deberá someterse a información pública, lo que implica un trámite de aproximadamente un año. Después, será necesario que el Ministerio de Medio Ambiente elabore un estudio de impacto ambiental que también conlleva un amplio margen de estudio e información. En el mejor de los casos, pasarían dos años, que podrían alargarse a cuatro años (así ocurrió con el informe sobre el soterramiento de las vías en Langreo).

Los técnicos del Ministerio de Fomento consideran que la obra de ejecución de la ronda ferroviaria llevará aproximadamente otros cinco o seis años, por tanto, la supresión de la barrera no estaría lista hasta pasados unos diez años, según las estimaciones iniciales.

Pero la verdadera columna vertebral deberá ser la financiación. La gran cuantía de la inversión ha generado las primeras suspicacias. El Ministerio de Fomento intentará sumar a más entidades para financiar las obras. Así, Feve es una de las gran beneficiadas por la solución al incorporarse dos nuevos apeaderos. Renfe y el Puerto también se verán favorecidos, por lo que es posible que se incorporen al convenio financiero. En todo caso, el protocolo firmado entre Gobierno central, Principado y Ayuntamiento el pasado 6 de febrero de 2008, establecía que el coste de la infraestructura se repartiría con dos tercios a cargo de la administración autonómica y un tercio a cargo del Ministerio de Fomento.

El elevado coste de la solución planteada por Víctor Morlán obliga a buscar nuevas fórmulas de financiación. Estas deberán decidirse a lo largo del próximo año, antes de que se someta a información pública el trazado definitivo de la variante ferroviaria, según indicó el propio secretario de Estado. Una de las opciones que hay sobre la mesa es la de incorporar a otras entidades y repartir al cincuenta por ciento el grueso del coste entre el Principado y el Ministerio de Fomento. Es precisamente el compromiso de que el año próximo se someterá a información pública el proyecto y antes se habrá acordado su marco financiero, al que se agarra el Ayuntamiento para dar como incuestionable la voluntad del Gobierno central de resolver la barrera ferroviaria avilesina. «Con las palabras de Víctor Morlán ha quedado despejada cualquier duda. El resto de fechas y reparto de cantidades se irá viendo, pero ya hay una voluntad clara y confirmada», aseguró ayer la Alcaldesa de Avilés, la socialista Pilar Varela.

Variante

Nueva variante ferroviaria por el corredor de la carretera N-632, con parámetros aptos para mercancías y viajeros

Estaciones

Nueva estación intermodal frente a la Isla de la Innovación, entre la avenida del Marqués de Suances y la ría. Permite el intercambio entre Renfe, Feve y autobuses. Además se prevén dos nuevos apeaderos en Gaxín y La Llamosa. Se mantienen los de La Rocica, San Juan y San Juan de Nieva, Raíces y Salinas.

LIberación de suelos

Se liberará el pasillo ferroviario actual junto a la ría, así como los terrenos ocupados por instalaciones auxiliares. En una segunda fase está prevista la construcción de un tren-tran por el actual recorrido férreo.