E. CAMPO

La ciudad acaba de recuperar para su patrimonio una pieza que desapareció de la ciudad hace 200 años y de cuya memoria sólo quedaban pequeños rastros en el archivo municipal: se trata de un fuero «gemelo» del que se conocía hasta ahora. Los catedráticos de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Oviedo Josefa Sanz e Ignacio Ruiz de la Peña avalan la autenticidad de este documento cuyo «rescate» costó 72.000 euros. Según detalló el concejal de Cultura, Román Antonio Álvarez, el Ayuntamiento sólo aportó unos 22.000 euros, mientras que el resto se costeó con donaciones particulares.

Tanto este fuero como el que ya se custodiaba en la ciudad están fechados en el año 1155 y realizados bajo el reinado de Alfonso VII. Ambos documentos tienen pequeñas diferencias, ya que el que ahora recuperó el Ayuntamiento tiene dos párrafos más que el anterior y además toda la superficie del pergamino está completa. Además no coincide la letra del amanuense, por lo que se supone que los encargados de las dos copias fueron personas diferentes. Según explicó Álvarez, los dos párrafos que se añaden en este segundo fuero están recogidos también en el fuero de Oviedo, cuya datación es posterior a la de los avilesinos.

La alcaldesa, Pilar Varela, definió esta recuperación como «un acontecimiento muy importante para la ciudad», y apostó por poner en valor la historia a la par que se trabaja por el futuro. Según su relato, desde la década de los noventa se encontraron indicios de la existencia de un pergamino similar al fuero de Avilés, de época de Alfonso VII, y que confirma el otorgado por Alfonso VI en 1085. En un inventario del archivo municipal, realizado en 1740, se hablaba de este segundo fuero, pero hasta hace poco no se sabía nada de él.

Según contó Varela, la pista del documento se perdió hace 200 años, coincidiendo con la llegada de los franceses; la hipótesis es que este segundo fuero estaba en aquella época en Oviedo, en la Regencia, tal vez para resolver algún asunto legal. Y la salida por la vía rápida del regente, Pascual Quílez y Talón, pudo motivar que éste se llevara algunos documentos, entre ellos el documento avilesino. De hecho, hasta hace dos días estaba en la casa de un descendiente de Quílez y Talón, residente en Murcia.

La Alcaldesa, que se mostró muy satisfecha de la recuperación de este fuero, explicó que hace ya meses que las gestiones para buscarlo, iniciadas por Román Antonio Álvarez, dieron su fruto, y que lo primero que se hizo fue garantizar la autenticidad de esta pieza gracias a la opinión de expertos en la materia. El paso siguiente fue reunir el dinero necesario para su compra, y con todo esto resuelto, el lunes 21 de diciembre el edil se hizo con este «gordo» de la lotería de la historia.

Los primeros en conocer la noticia, ayer por la mañana, fueron los representantes de los distintos grupos políticos en el Ayuntamiento de Avilés. La presentación oficial de este documento se realizará el próximo año, con un acto aún sin concretar pero que puede ir acompañado de un congreso de expertos, según se indicó ayer.

El aspecto que presenta el fuero, que exhibieron Varela y Álvarez, es el de un pergamino de piel compuesto de dos piezas de 0,45 metros de ancho y que juntas alcanzan los 1,25 metros de alto. Según dijo el edil de Cultura, será necesario someterlo a una restauración ya que los pliegues, muy pronunciados, amenazan ruptura.