E. CAMPO

Las últimas horas de 2009 y las primeras de 2010 se saldaron en Avilés con cuatro accidentes de tráfico y otros tantos heridos, uno de ellos grave. Aunque la noche fue «tranquila» en toda la comarca, según fuentes policiales, los agentes abrieron instrucciones contra varios conductores, en Avilés y Castrillón, por conducir bajo los efectos del alcohol. Otro vecino de Avilés está acusado por circular sin permiso de conducir y de darse luego a la fuga.

El primero de los accidentes se produjo a las tres y veinte de la tarde del 31 de diciembre, en el cruce entre Valdés Salas y Cervantes. Dos vehículos -un Ford Focus y un Volkswagen Combi- tuvieron una colisión por alcance, y resultó herida leve la conductora de uno de los coches. Ella misma se trasladó al hospital por sus propios medios, según informó la policía.

El mismo cruce fue escenario de otro accidente más grave, que ocurrió a las cinco y veinte de la tarde. Otros dos vehículos chocaron, también por alcance, y como consecuencia del impacto colisionaron con un tercero que estaba estacionado. Resultó herida la conductora del vehículo alcanzado con lesiones en el brazo y en las piernas, y tuvo que ser trasladada en una ambulancia al Hospital San Agustín. La Policía Local detuvo al conductor del otro vehículo, acusado de conducción temeraria: su identidad se corresponde a las iniciales I. P. M., tiene 23 años y es vecino de Avilés.

El último accidente del 31 de diciembre fue a las ocho de la tarde, también por alcance, en la calle Gutiérrez Herrero. En esta ocasión los heridos fueron los dos agentes de la policía que ocupaban el coche que recibió el impacto. Ambos fueron trasladados al San Agustín y quedaron de baja.

Ya en 2010, un vehículo chocó contra un semáforo, en Larrañaga. Los hechos ocurrieron a las siete y media de la mañana. Los agentes de la Policía Local instruyeron las primeras diligencias policiales del año al conductor del coche, D. G. G., de 24 años y vecino de Avilés, que dio positivo en la prueba de alcoholemia al superar con creces los límites permitidos. Concretamente dio una tasa de 0,80 gramos de alcohol por litro de sangre.

Por último, a las nueve y media de la mañana los agentes abrieron diligencias a un conductor por dos delitos contra la seguridad vial: conducir sin permiso y conducción temeraria. El acusado, J. M. H. H., es un viejo conocido de la Policía, y después de que le descubrieran conduciendo sin permiso un vehículo con matrícula 6733-DVK se dio a la fuga entre Buenavista y La Carriona saltándose semáforos, pasos de peatones y obligando al resto de vehículos a hacerse a los lados para no colisionar. Como el acusado ya había sido detenido en otras ocasiones la Policía decidió detener la persecución para evitar males mayores, e inició las diligencias oportunas.