Juan C. GALÁN

La enseñanza española protagoniza una situación paradójica: por un lado, el Gobierno apela a la educación para combatir la violencia de género pero, por otro, no pone los medios necesarios para erradicar el sexismo en las aulas. Marián Moreno, profesora de Lengua española en el instituto de Los Campos y experta en coeducación, se encargó de recalcar tal contradicción a lo largo de una conferencia con la que abrió el curso «Educación para la igualdad» en el CPR de Avilés, y a cuya presentación acudió la alcaldesa, Pilar Varela. Moreno fue tajante al señalar que «aún queda mucho por hacer» en cuanto a la educación no sexista. «La idea más peligrosa es pensar que todo está conseguido porque existen unas leyes», recalcó la educadora.

Marián Moreno trató de dotar a su exposición de un ingrediente de optimismo para colorear un panorama oscuro. «Sólo hace falta tener contacto con los jóvenes para ver que aún tienen unos prejuicios sexistas enormes, en algunos casos escandalosos», señaló. Para la experta en coeducación, dos son las raíces de tales prejuicios: «La influencia de la televisión y la pasividad del sistema educativo, que no se decide a educar por la igualdad», comentó la profesora del instituto de Los Campos.

Para Marián Moreno, los personajes femeninos en televisión son estereotipos dignos del pasado. «Hay dos tipos: bien madres amas de casa, bien chicas con un físico impresionante. Fuera de ahí, las adolescentes no encuentran otros referentes», señaló Moreno. Lo mismo pasa, según la educadora, con los materiales que se utilizan en el aula. «Aún se mantiene un lenguaje sexista y no se hace visible el papel determinante de las mujeres en la historia», afirmó la profesora.

Marián Moreno terminó su disertación con una afirmación tajante: «La educación en igualdad puede salvar vidas. Una enseñanza no sexista ayudaría a prevenir la violencia de género», señaló.