S. F.

La obra más importante del año en materia cultural es la que se está llevando a cabo en la orilla derecha de la ría. Se trata del Centro Niemeyer. Las instalaciones que gestiona la Fundación de Cultura han sufrido en 2009 unas fuertes intervenciones. «El Niemeyer y nosotros no somos competencia, no podemos serlo. Prueba de ello es que sus oficinas están en el teatro; no están ahí porque no había otro sitio, tácitamente esta ubicación recuerda que colaboramos nosotros con ellos y ellos con nosotros», apuntó ayer el concejal de Cultura, Román Antonio Álvarez, en la presentación de los números de la Fundación de Cultura.

Precisamente, las obras explican, según comentó Álvarez, la disminución en el número de lectores. «Hemos tenido que cerrar la sala de préstamo y esto se ha notado», comentó. Los datos son esclarecedores: en 2008 se registraron 378.276 lectores y el pasado año el descenso ha dejado la cifra en 311.000. «Que no deja de ser enorme», recalcó el concejal.

El número de conciertos organizados ha disminuido, aunque de forma muy atenuada: cuatro conciertos menos en 2009 que en 2008. Lo que sí se nota es que este pasado año las tablas del odeón local acogieron mucha mayor actividad musical que en 2008. «La causa es el Niemeyer, que ha utilizado el teatro para muchas de sus actividades», recordó Álvarez. En 2008 fueron dos los conciertos y en 2009, seis. Entre los conciertos programados destacan el de Joan Manuel Serrat o Barbara Hendricks, ambos, programados por el centro cultural que dirige Natalio Grueso.

El número de representaciones también ha disminuido, principalmente, por el cierre del teatro Palacio Valdés a causa de las obras de restauración. En todo caso, el odeón se ha abierto más de una vez por semana. En 2009, fueron 57 veces y en 2008, 63.

Estas cifras a la baja tienen la cura próxima: para este semestre están previstos ocho estrenos nacionales, cuatro de ellos, por productoras de más allá del Pajares. El primero, anoche mismo.