Francisco L. JIMÉNEZ

La cofradía de pescadores «Virgen de las Mareas» de Avilés ha desempolvado el proyecto para poner en funcionamiento una organización de productores pesqueros (OPP) en Asturias -la única región del litoral español que carece de este instrumento- y tratar de paliar así, en la medida de lo posible, la crisis que afecta al sector y amenaza, en algunos casos, con arruinar a los armadores. Las OPP son sociedades que permiten a sus miembros cierto intervencionismo en el mercado cuando los precios del pescado caen por debajo de ciertos mínimos fijados de antemano. «Esta situación es insostenible por más tiempo; llevamos años perdiendo la oportunidad de acceder a fondos europeos de los que sí dispondríamos si funcionase Opastur (el nombre de la OPP que promovió sin éxito la Cofradía hace cuatro años). Y como no creemos que existan razones legales para impedir la puesta en marcha de esta organización es por lo que hemos dado el primer paso para desbloquearla», declaró ayer el patrón mayor de la Cofradía, Gregorio López.

El «primer paso» del que habla el presidente de «Virgen de las Mareas» consistió en una reunión con el director general de Pesca del Principado, Marcelo Menéndez Cuervo, a la que asistieron también representantes de las cofradías de Lastres y Luarca y de los armadores de palangre. «Por parte del principado no hay ningún problema en apoyar la activación de Opastur, salvo que existe una sentencia de 2006 donde se indican los aspectos de los estatutos que deben ser reformados y eso debe cumplirse. Asimismo debería de actualizarse el registro censal de los intervinientes en la OPP y acreditar la voluntad de todos ellos. Es decir, si se cumple la ley, adelante con la idea», manifestó Marcelo Menéndez.

Gregorio López resta importancia a los aspectos legales pendientes de solución y recalca que «pueden ser subsanados en breve plazo y sin mayor problema», lo cual es imperativo, a tenor de las palabras de Marcelo Menéndez, para que el Principado autorice Opastur y esta pueda empezar a trabajar. El patrón mayor de la Cofradía de Avilés explica que el frenazo que sufrió Opastur cuando hace cuatro años se trató de poner en marcha tuvo mucho que ver con la «animadversión» del anterior director general de Pesca del Principado, Alberto Vizcaíno, hacia la Cofradía. No obstante, Gregorio López dice que prefiere «dejar en paz el pasado y pensar en el futuro».

El máximo responsable de «Virgen de las Mareas», presidente a la sazón de Opastur, asegura ser consciente de que la OPP entraña «derechos y obligaciones». Entre estas últimas, la aprobación de planes de pesca que comprometan a los armadores en materia de «pesca responsable»; esto es, que los propios pescadores sean los primeros en tomar medidas (autorregular sus capturas) para evitar la saturación del mercado. Asimismo, López rechaza las críticas de quienes sospechan que Opastur -por no tener entre sus socios a todas las cofradías asturianas- es «un traje a medida de la Cofradía de Avilés». «Esto no es un chiringuito de nadie, es un instrumento que, bien gestionado, puede ser eficaz a la hora de evitar que el pescado se siga pagando a precios ínfimos», aseveró.

La iniciativa de la cofradía de pescadores sobre Opastur ha encontrado eco en la nueva rula de Avilés, cuyo gerente, Ramón Álvarez, ha publicado una circular informativa al respecto de las intenciones de «Virgen de las Mareas». El posicionamiento de Álvarez, siendo favorable a priori a contar con una OPP en Asturias, subraya la existencia de determinadas reglas que deben ser observadas en este proceso y que guardan relación con los procedimientos comerciales para dar salida al pescado que se retire del mercado, la adaptación de los desembarcos pesqueros a la demanda y la representatividad de todos los agentes pesqueros en la OPP. En suma, Ramón Álvarez advierte de que el momento aconseja «remar todos en el mismo sentido, aparcar los localismos y luchar por conseguir la unión fuera de un clima de personalismos».

El cambio de «look» de la vieja rula de Avilés, ahora reconvertida en sede conjunta de la cofradía de pescadores «Virgen de las Mareas» y la Cruz Roja del Mar, ya es perceptible. Las antiguas fachadas de cemento han sido revestidas de placas metálicas pintadas de color cobre que, a modo de escamas, cubren el edificio y le dan un aspecto más moderno. Las obras, que corren por cuenta de la Cofradía, concluirán en cuestión de días. En la imagen, el nuevo aspecto de la lonja.

«Bien gestionada, la OPP puede evitar que el pescado se pague a precios ínfimos»

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Patrón mayor de Avilés

«Es momento de remar todos juntos y de dejar de lado los personalismos»

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Gerente de la nueva rula