S. FERNÁNDEZ

Fernando Campelo se sube a uno de sus coches y lo pone en marcha: «Tienen todos los papeles, están pagados todos los seguros, se puede circular con ellos sin ningún problema», comenta el coleccionista. Sus coches, sin embargo, no son muy comunes: dos Rolls Royces de la Belle Époque, varios Ford T -el utilitario de los años veinte- y hasta un camión de bomberos. «Había sido de un jefe de Bomberos de Detroit, en los Estados Unidos», apunta. Tienen una sección militar: «Son del Afrika Corps, del mariscal Rommel... con todos los certificados».