Amaya P. GIÓN

Los ecologistas califican de «cachondeo» el fallo del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) que exculpa a Arcelor por el vertido a la ría que tiñó de galipote el estuario avilesino en noviembre de 2007. El portavoz del colectivo, Fructuoso Pontigo, mostró ayer su sorpresa por el contenido de la sentencia y anunció que se pondrá en contacto con el Principado para analizar la posibilidad de presentar un recurso a la sentencia del alto tribunal asturiano.

«Es un día tristísimo para el medio ambiente avilesino. Se puede discutir la cuantía de la sanción pero la autoría es evidente», destacó Pontigo. El tribunal considera que las pruebas existentes no bastan para determinar que los hidrocarburos proceden de Baterías de Coque. «Estamos vendidos ante los grandes. Si el vertido procediese de un taller pequeño no habría ninguna duda sobre la autoría», sentenció. La sentencia del TSJA vuelve a quedar en el aire la procedencia del vertido, uno de los más graves de la última década. «¿Ahora a quien le echamos la culpa, a las gaviotas? Esto es increíble», añadió el ecologista, que volvió a referirse a la avería que se registró en la siderúrgica dos días antes de la localización del vertido. La sentencia recoge que no es posible concluir que el corte de energía eléctrica del 18 de noviembre de 2007 pudiera dar lugar al vertido y que las proporciones de las muestras de hidrocarburos de San Balandrán y de Arcelor no coinciden.