S. F.

Ya son veintiuno los coches que han ardido en la comarca desde el pasado 26 de diciembre. Ayer por la mañana, antes de las nueve, el 112 recibió una llamada de una vecina que alertaba sobre la quema de un vehículo en la linde de los concejos de Corvera y Avilés, en la carretera de Molleda de Abajo. Se trataba de un Ford Escort que había sido robado el domingo 23 del lugar en el que estaba estacionado, junto a un descampado. La Policía Nacional investiga si este nuevo incendio de un turismo guarda relación con la veintena de casos que la comarca viene sufriendo desde hace cinco meses.

Los Bomberos, la Guardia Civil y la Policía Local de Corvera fueron avisados por el servicio del 112, pero ninguno de estos cuerpos de seguridad tuvo que intervenir dado que el coche se encontraba en el concejo de Avilés y las llamas ya se habían consumido. El caso quedó en manos de la Policía Nacional, que identificó el turismo quemado como el denunciado el día anterior por un vecino de Avilés.

Los autores de la quema de coches se están ensañando, sobre todo, con el concejo de Castrillón. Desde fines de año se han contabilizado en esa zona siete actos vandálicos que se saldaron con una decena de vehículos completamente calcinados. El último sucedió el pasado día 13. Todos los sucesos tienen, además, un hilo conductor: la mayoría de los coches que han aparecido quemados son de alta gama. Algunos vecinos de las zonas próximas a los siniestros recuerdan que esos mismos días vieron a grupos de jóvenes (todos hombres) grabando con los móviles los incendios.

La oleada de incendios en coches comenzó a ser más grave a partir de finales de diciembre. Casi todos los casos están en manos de la Guardia Civil y no se descarta que los incendios guarden relación, aunque el Escort de ayer por la mañana es el primero que arde después de haber sido robado, según fuentes oficiales.