En Sabugo casi todos se llamaban Manuel

En el barrio de Sabugo casi todos sus habitantes se llamaban Manuel. Por lo menos durante el Antiguo Régimen, que es un período que el escritor avilesino Miguel Solís Santos coloca entre los Austrias menores y los primeros Borbones. «Los que se llamaban Manuel fueron ganando a los Toribios, las Toribias y las Mencías», comentó Solís. «Lo de los nombres no parece algo baladí, dibuja la sociedad del muy católico reino de España», apostilló el autor, que ofreció una conferencia en la que, a partir de un trabajo de archivística profundo, fue desgranando los usos y costumbres del genuino barrio de pescadores de Avilés. Todo ello ha dado fruto en el grueso estudio «Sabugo. El Barrio Marinero de Avilés durante el Antiguo Régimen» (Krk, 2010), ganador del premio «Padre Patac» de 2009.

Justo Ureña, el cronista de la villa, ponderó a Solís Santos como historiador «pese a su condición de profesor de Ciencias de la Naturaleza». Para Ureña, «un biólogo puede ser historiador sin ofender a Dios, ya lo dijo el doctor Marañón». Definió la última obra de Solís como «una concienzuda exhumación de datos históricos imprescindibles para reconstruir el pasado». Y concluyó que, sólo por esta razón, el último estudio del escritor «se ha hecho ya imprescindible para los amantes de la historia». Tras las palabras de Ureña tomó el relevo el propio Solís Santos, vecino de Sabugo de toda la vida, «ratón de biblioteca», en palabras del coordinador del Club LA NUEVA ESPAÑA, Javier Gancedo. Solís Santos, que es un clásico de la literatura en asturiano, fue desgranando, gráficos digitales en el retroproyector, cómo se nacía en Sabugo, de qué se vivía, por qué se moría y, sobre todo, quiénes eran los vecinos de aquellas cuatro calles que desembocaban en la plaza del Carbayo, el centro del promontorio que fue, en palabras del escritor, puerto de la capital para pasar, siglos después, a transformarse en uno más de los arrabales avilesinos consumidos en pestes, naufragios y algunas guerra.

Habló de sabugueros renombrados y recordó que hoy mismo se celebraría el 348.º aniversario del escritor más importante de la historia de Avilés: Bances Candamo. Cerraron el acto la alcaldesa Pilar Varela y el director general de Patrimonio y de Tursimo, José Luis Vega. La historia escondida de los pescadores sale a la luz.