S. F.

Varios vecinos de Llaranes, de la avenida de Santa Apolonia y de Villalegre se quejaron a la Policía Local de un fuerte olor a benzol, supuestamente, de procedencia industrial. La Coordinadora Ecologista denunció esta circunstancia tanto a las fuerzas de seguridad del Ayuntamiento como al Principado. Los agentes se trasladaron a la ría de Avilés, pero no localizaron el motivo de las quejas vecinales y de los ecologistas. Desde el Principado tampoco informaron sobre ningún vertido incontrolado. Fuentes sindicales tampoco denunciaron ninguna maniobra laboral que hubiera podido ocasionar el mal olor que cubrió, según los vecinos, la zona sur de la ciudad.