E. CAMPO

El proceso de normalización de la toponimia del concejo de Avilés, cuyo listado definitivo ya se publicó en el BOPA, continuará ahora con su traslado al Instituto Nacional de Estadística (INE) para que se recojan todos esos topónimos en la nueva cartografía. El Ayuntamiento, a su vez, tiene por delante el reto de hacer la nueva rotulación, que llevará su tiempo y estará también sujeta a las posibilidades económicas. En cualquier caso, es el próximo paso para consolidar definitivamente un decreto que ya está en vigor desde el 5 de diciembre.

El proceso comenzó en el año 2004, con la recogida de datos que luego se enviaron a la Xunta de Toponimia. Una vez superado este trámite, el documento se devolvió al Ayuntamiento, donde quedó paralizado hasta el año 2009. Recibió entonces el visto bueno de la Comisión de Cultura y del Pleno, volvió a la Xunta, recibió varias aportaciones y se aprobó definitivamente, tanto en el Ayuntamiento como en el Principado, que ahora la publicó en el BOPA.

«Hay muy pocos cambios respecto a los nombres oficiales, porque la toponimia ya estaba asentada en la gente; sobre todo se cambiaron detalles ortográficos, cosinas muy simples», explica Montserrat Machicado, responsable de la Estaya de la Llingua. De hecho, afirma, no hubo ningún problema durante todo el proceso de consulta, y tuvo el apoyo de las asociaciones de vecinos para incorporar nombres. «Aquí la toponimia es muy tradicional, con nombres como La Grandiella, El Carbayedo... no se trata de asturiano o de castellano, sino simplemente de reconocer los nombres auténticos de los sitios», añadió Machicado.

La lista con los topónimos oficiales del concejo de Avilés apenas depara sorpresas, después de la controversia entre si Las Meanas o Les Meanes: al final, ambos son válidos. Entre lo más llamativo se encuentra la recuperación del topónimo La Xungarosa, para referirse al también válido Barrio de La Luz. En muchos casos los cambios se limitan a cambiar los plurales para que terminen en «es», y los apóstrofes que unen artículo y nombre, como L'Altamira o L'Otero. También se añade San Xuan en sustitución de San Juan.