Myriam MANCISIDOR

«El ocho por ciento de las personas mayores de 74 años sufre alzhéimer. Pero hay que ser moderadamente optimistas, es una información sobre la que se investiga mucho y el conocimiento médico avanza», explicó ayer José María Terrero, neurólogo del Hospital San Agustín, durante la charla bautizada «De las demencias al alzhéimer» que ofreció en el palacio de Valdecarzana organizada por Amigos del País. La conferencia estaba enmarcada en el ciclo promovido por la entidad avilesina con motivo del año internacional para la investigación del alzhéimer, una enfermedad neurodegenerativa.

Terrero explicó ante un nutrido grupo de personas cuáles son los síntomas visibles de esta patología. El más llamativo, sentenció, es la pérdida de memoria a corto plazo. «Generalmente los enfermos se olvidan de fechas, recados o conversaciones recientes mientras que mantienen la memoria antigua», subrayó. A este síntoma hay que sumar otros como dificultad para expresarse, problemas de orientación o de manejo, por ejemplo, de distintos aparatos como los mandos a distancia. «Lo que hay que tener claro también es que no todas las pérdidas de memoria son alzhéimer. Quien esté preocupado puede realizar un sencillo test en su consultorio de atención primaria», manifestó Terrero, que precisó que la depresión es una causa frecuente de pérdida de memoria relacionada en ocasiones con el alzhéimer.

Esta enfermedad neurodegenerativa carece aún de fórmulas eficaces de prevención pero, según el neurólogo del San Agustín, es importante que la población mantenga una vida social activa, realice actividad física al menos tres veces a la semana y evite factores de riesgo vascular como la diabetes o la hipertensión. «También es fundamental mantener la mente ágil, si fuera por mí le mandaría a todo el mundo que estudiara», sentenció, y añadió: «Lo que no se puede permitir es que el enfermo se retraiga, y en la estimulación cognitiva tiene mucha importancia la familia del enfermo».

El alzhéimer se trata, a día de hoy, con fármacos que pueden reducir los síntomas de la enfermedad. «Como decía debemos ser moderadamente optimistas, los avances médicos son muchos y cada año aparecen nuevas terapias», concluyó el especialista del servicio de neurología del Hospital San Agustín.