Francisco L. JIMÉNEZ

El descubrimiento y restitución del lecho original de la ría de Avilés a la altura de la antigua nave de laminación en caliente de Ensidesa es una de las sorpresas agradables que ha deparado en los últimos días la obra de recuperación ambiental del tramo de estuario que discurre entre el barrio avilesino de Garajes (parroquia de Llaranes) y el corverano de La Marzaniella (parroquia de Trasona). La restauración del estado primigenio de la ría en su tramo más alto va paralela a la prolongación en 1,2 kilómetros de la senda peatonal que arranca en el puente de San Sebastián y finaliza en el puente del Hospitalillo. Dentro de pocos meses ese paseo tendrá en total 3,2 kilómetros, 4,2 si se suma al tramo de carácter fluvial el kilómetro de paseo marítimo de la avenida del Conde de Guadalhorce.

Los trabajos medioambientales que se realizan en la ría a caballo entre los concejos de Avilés y Corvera están ejecutados en un 60 por ciento, según las estimación de la Consejería de Medio Ambiente del Principado, el organismo que financia los 5 millones de euros que cuesta esta operación de limpieza. «Ya se llevan extraídos más de 6.000 metros cúbicos de limos y lodos, una intervención que ha hecho posible algo tan histórico como el afloramiento del lecho original de la ría», señaló a este diario una portavoz de la consejería. Las previsiones que establece el proyecto pasan por la extracción de 50.000 metros cúbicos de materiales a lo largo de los 1,2 kilómetros que mide la zona a restaurar. «Los lodos que se sacan del cauce de la ría se están llevando a la zona de las canteras del Estrellín, donde son encapsulados en las debidas condiciones de seguridad», precisó la misma fuente.

El plazo fijado para la finalización de la obra es el próximo mes de agosto. Entonces los corveranos y los avilesinos quedarán comunicados por una senda de más de 3 kilómetros que discurre paralela a la ría, antes una cloaca y ahora un símbolo del Avilés que viene.