Amaya P. GIÓN

Los avilesinos no quieren ni oír hablar de la tormenta política que azota al Centro Niemeyer desde hace unos días. Lo que pretenden es que se lave la imagen del complejo cultural de la ría y defender que éste es de la ciudadanía, y no de los políticos. Así se lo trasladaron ayer por la tarde a la alcaldesa de Avilés, Pilar Varela, que convocó a los agentes sociales y a los colectivos vecinales para explicarles en persona la moción que aprobó el Pleno municipal horas antes. «Desde Avilés no podemos permitir este ataque. Exigimos respeto», se dirigió Varela al centenar de participantes en el encuentro, entre los que se encontraban el presidente de la Cámara de Comercio, Francisco Menéndez; sindicalistas; la presidenta de la asamblea de Cruz Roja, Nelly Fernández, y representantes de asociaciones vecinales y culturales de la ciudad.

Varela repasó la breve pero densa historia del proyecto cultural de la ría desde los orígenes y lamentó la postura de IU en el Pleno. «Hubiese esperado tener más apoyo, pero cada uno es responsable de sus decisiones», dijo sin entrar en más detalle.

Los vecinos defendieron a capa y espada un centro que consideran suyo. «El daño que han hecho es muy grande, ¿cómo se corrige ahora?», planteó la representante de los vecinos de La Luz, Alicia González, que mostró su indignación con la postura del Principado. El portavoz de los residentes en el centro, Antonio Carretero, fue tajante: «Estoy a muerte con el Centro Niemeyer. Toda lo que está pasando es una maniobra orquestada, un ataque a la ciudad. No entro en si hay o no irregularidades, que lo desconozco, pero las formas son muy importantes», señaló.

También intervino el presidente de la asociación cultural Avilés Joven, Juan Carlos Galiano, que hizo un llamamiento a la movilización: «He llamado a otras asociaciones y creo que tenemos que hacer algo. No sé si esto es una lucha política, puede que sí, pero no me importa mucho porque el Niemeyer es mío y de 90.000 personas más. Nadie nos lo va a machacar, es intocable y vamos a luchar por él. El Ayuntamiento no puede estar solo en esto», se dirigió a los presentes.

Nelly Fernández manifestó que es «absurdo que se intente torpedear un proyecto que está en marcha y que funciona; lo del Principado me parece más ignorancia que mala fe». Y los representantes de CC OO volvieron a apelar al diálogo y a la unanimidad. «Lo que se ha hecho no tiene nombre. Una Consejería que responde así no puede representar a ningún ciudadano», espetó el secretario de organización de la central, José Manuel Rodríguez Baltar.

También el secretario comarcal de UGT, Amado González, mostró su apoyo a la moción que aprobaron ayer PSOE y PP. «Las formas de la Consejería de Cultura son impresentables. Lo que está desechando la ciudadanía es ese nivel de política, a base de insinuaciones y desprestigios. Si existe un patronato, es en él donde hay que dirimir las cuestiones de la Fundación y no desprestigiar la labor del centro. Tiene que haber diálogo y acuerdo. ¿Si el Niemeyer estuviese en otra ciudad de Asturias, habría sucedido lo mismo que está ocurriendo aquí?», planteó.

La Alcaldesa insistió en que el encuentro, coordinado por el concejal de Participación Ciudadana, era a título informativo. «Cada uno tendrá su opinión, no quiero influir en ella. Pero el sábado estaba perpleja y supongo que todos estaréis como yo, ¿esto a cuento de qué?», se dirigió Varela a una ciudadanía volcada con el proyecto de la ría.