El sumi-e se desarrolló en China durante la dinastía Tang (618-907) y se implantó como estilo durante la dinastía Song (960-1279). Sus primeros maestros fueron, entre otros, Wu Tao-Tsen (700-760) y el poeta Wang-Wei (689-759). Fue a mediados del siglo XV cuando los monjes budistas zen intrujeron esta técnica artística en Japón donde se hizo popular muy rápidamente llegando a su apogeo en el periodo Muromachi (1338-1573). Entre los maestros japoneses más conocidos historicamente se encuentran Sesshu, de mediados del siglo XV, y también Tensho Shubun.