La abogada laboralista Begoña Escalona (Llaranes, Avilés, 1955) analizó ayer el contenido de la reforma laboral en una jornada informativa organizada por la Cámara de Comercio. La letrada lanzó el siguiente mensaje a los participantes: «De ésta, o salimos de la mano o no lo conseguiremos. No puede utilizarse esta reforma sectariamente, hay margen para interpretar muchas cosas con la colaboración de todas las partes implicadas: Administración, trabajadores y empresarios». Escalona constata que las empresas asturianas están preparando ya una oleada de ajustes. «Están llegando consultas, pero de momento son más bien informativas», dice.

-¿Y eso pone de manifiesto que las primeras consecuencias de la reforma laboral serán más paro y salarios más bajos?

-Las consultas no son sólo referidas a las extinciones de contrato, sino sobre medidas que prevé el decreto con relación a los convenios, modificación de condiciones de trabajo, suspensiones temporales, movilidad funcional y del personal.

-¿La reforma echa por tierra los derechos de los trabajadores?

-Supone un cambio sustancial en los derechos de los trabajadores. Pretende crear un clima para mejorar las condiciones económicas y de mercado que puedan generar mayor empleo. Evidentemente, sí que hay una serie de derechos que desaparecen, pero si se interpreta adecuadamente la reforma, pueden surgir otros nuevos. Habrá mayor negociación en ámbitos más pequeños, en la empresa, donde tendrán que negociarse muchas cosas, por ejemplo los grupos profesionales.

-El decreto realiza profundos cambios en el Estatuto de los Trabajadores, ¿cuáles son los principales?

-Hay varios. La necesaria autorización administrativa para expedientes de regulación de empleo desaparece, ahora sólo hay que comunicárselo a la autoridad administrativa y tras una negociación será una decisión empresarial. También es un cambio importante el relativo a la sustitución de las categorías profesionales por grupos, un concepto más amplio que engloba más actividades. Eso se traduce en una mayor movilidad funcional dentro de las empresas funcional. También es relevante, y en este caso es una reducción de derechos, la menor indemnización en caso de despidos. Y en cuanto a la formación profesional, se intenta potenciar con una serie de medidas encaminadas a que el trabajador pueda acreditar toda su formación a través de una tarjeta y dispondrá de un permiso de veinte horas para adaptarse a las modificaciones que se operen en la empresa.

-¿Y cómo puede afectar la reforma en el empleo a una comarca avilesina, con un marcado carácter industrial?

-Creo que no de manera distinta que en otras zonas. La reforma afecta no sólo a sectores industriales, sino, por ejemplo, también al personal laboral de la Administración, al de entidades financieras que sean tributarias o reciban dinero público. No creo que afecte a Avilés de manera especial. Me llamó la atención un dato que leí esta mañana (por la de ayer) en su periódico, que en Avilés se ha destruido casi más empleo autónomo individual que en el sector de la construcción, uno de los más afectados por la crisis.

-¿Qué incidencia puede tener la reforma en los desempleados?

-Se trata de fomentar la contratación, la flexibilidad en el empleo para que no aumenten más los parados.

-La veo optimista...

-A corto plazo la reforma no creo que vaya a generar empleo sino a destruirlo. Espero que a medio plazo, año y medio vista, la situación permita crear ese empleo y mejorar la economía. No es que sea optimista, quiero serlo.

-¿Cómo la califica?

-Creo que es muy profunda y que era necesaria ya que las medidas adoptadas hasta ahora no han demostrado que hayan sido suficientes.

-Despidos justificados pese a cierres con beneficios, ¿una carta blanca a los empresarios para maquillar cuentas?

-Las cuentas ya se podían maquillar antes. Lo que sí creo es que queda más estrictamente definido cuáles son las causas por las que se van a permitir esos despidos colectivos y objetivos por razones económicas. Va a haber menos margen a que la jurisdicción social pueda pronunciarse. De cualquiera de las maneras, tendrá que haber mucho desarrollo reglamentario en esta reforma y también mucho pronunciamiento judicial.