Señala el dicho que el papel lo aguanta todo. Y es cierto. Hace poco más de siete años, Luis Peláez, actual viceconsejero de Pesca con Foro, comparecía ante los medios (entonces como diputado del PP) para denunciar el hostigamiento del PSOE a la Cofradía de Pescadores que lideraba Gregorio López para arrebatarle la gestión de la rula y dársela a sus «amiguetes». Entre los que para Peláez eran «amiguetes» del PSOE se encontraban muchos de los que ahora han logrado apoyo en él mismo para anular por presuntas irregularidades el proceso electoral en la Cofradía que dio la presidencia al mismo Gregorio López. Los afines a López ahora acusan a Peláez de favorecer a sus supuestos amigos. Lo que pasa es que en política, antes y ahora, lo que funciona es pescar en río revuelto. En la Cofradía existe una irreconciliable división. La había antes y ahora. Pero los políticos se arriman a cada bando según les conviene y donde dijeron digo dicen diego y tan panchos. Lo que la Cofradía y el sector necesitan es rigor, seriedad, transparencia y afán por mejorar las cosas.